Los resultados de las elecciones de mitad de mandato en Estados Unidos,más allá de una renovación del Congreso, podrían suponer un freno al presidente Donald Trump, para avanzar en su agenda legislativa y en las decisiones que han polarizado el país.
La victoria del Partido Demócrata, al alzarse con la Cámara de Representantes después de ocho años de dominio republicano, indica que podrán tener el control de las comisiones, impulsar leyes y abrir procesos de investigación y gestión de poder.
No obstante, los demócratas no podrán dar inicio al proceso de juicio político hacia Donald Trump ya que no cuentan con la mayoría en la Cámara Alta.
A pesar de la campaña de intimidación y miedo impulsado por el presidente Trump para estos comicios, los resultados expresan el rechazo de los estadounidenses a la actual administración que ha llevado a la polarización de EE.UU..
Renovación del Congreso
Entre los diputados electos por el Partido Demócrata destacan una joven latina, dos mujeres musulmanas, dos representantes de pueblos indígenas, quienes rompen con el molde de la agrupación política.
El triunfo de la demócrata Alexandria Ocasio-Cortez, de 29 años de edad, la convierte en la mujer más joven en ser elegida al Congreso.
Ocasio – Cortez resultó elegida por el estado de Nueva York, enarbola con orgullo sus raíces latinas y asegura que conoce bien los problemas de la clase obrera que promete defender porque ella misma los padeció.
Otra de las nuevas caras en el Congreso es la de Ayanna Pressley quien se convirtió en la primera mujer afroamericana en representar al estado Massachusetts en el recinto legislativo.
Pressley venció en las primarias demócratas a Michael Capuano, quien sumaba diez períodos en el Congreso, en un distrito inclinado a la izquierda que incluye gran parte de Boston y la Universidad de Harvard.
La victoria de las demócratas Ilhan Omar y Rashida Tlaib por los estados de Minnesota y Michigan, respectivamente, las convierte en las primeras mujeres musulmanas en lograr un asiento en la Cámara de Diputados.
Rashida Tlaib, de 42 años de edad, de padres palestinos e Ilhan Omar, de 36 años y refugiada somalí, también rompe el esquema del Partido Demócrata.
Las demócratas Sharice Davids y Deb Haaland se convirtieron en las primeras mujeres indígenas estadounidenses elegidas al Congreso de EE.UU.
Davids, de 38 años, abogada, derrotó al actual representante republicano Kevin Yoder en el estado de Kansas. Fue criada por una madre soltera y veterana del ejército.
Haaland, de 57 años y de Nuevo México, es miembro de la tribu Pueblo Laguna. Es una activista comunitaria, que se ha esforzado para promover el voto entre la población indígena.
Otro de los cambios se dio en el estado de Colorado donde eligieron al demócrata Jared Polis convirtiéndolo en el primer gobernador abiertamente homosexual en EE.UU.. Polis venció al candidato del presidente Trump, el republicano Walker Stapleton.
Los resultados de las elecciones de mitad de mandato representaron la llegada al Congreso de nuevos políticos que rompen con el establisment política y que buscarán frenar la agenda legislativa del presidente Trump.
(Con información de Telesur)