Los testimonios de varias personas fueron claves para las autoridades que terminaron capturando al presunto asesino.
En Florida, Estados Unidos, un hombre habría querido aprovechar la emergencia que se vive en ese país y el mundo por el coronavirus, para hacer pasar por alto el presunto secuestro y crimen de su expareja, Gretchen Anthony, una mujer de 51 años de edad y maestra de profesión que se había divorciado recientemente de él.
De la mujer nadie había vuelto a tener noticias sobre su paradero, hasta que una amiga recibió a su celular un inquietante mensaje donde Gretchen, supuestamente, le contaba que tenía coronavirus y que se encontraba en el hospital Jupiter Medical Center, según informó la cadena de televisión estadounidense WPEC-TV.
Ante la duda de la amiga, esta dirigió el 25 de marzo hasta la comisaría para denunciar que algo no andaba bien. En medio de los interrogatorios, los investigadores descubrieron que otro amigo de Gretchen también había recibido un mensaje de texto, supuestamente de la maestra, donde le indicaba que tenía covid-19 y que estaba internada en el Jupiter Medical Center. A su vez, le decía que la iban a llevar a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Belle Glade, Florida, donde la iban a sedar.
Con esta información los agentes lograron comprobar rápidamente que todo era mentira, pues Gretchen Anthony no hacía parte de ningún listado hospitalario de personas portadoras de coronavirus. Lo único curioso es que a las afueras del hospital sí hallaron su vehículo estacionado y su cartera.
Sin embargo, comprobaron que en Belle Glade, Florida, no existe ningún CDC, como supuestamente ella decía en el mensaje a su amigo.
Con parte de la investigación adelantada, los agentes se dirigieron el 26 de marzo a la vivienda de la mujer desaparecida. Ese mismo día un vecino del sector, según se lee en el informe policial al que tuvo acceso WPEC-TV, le preguntó a los investigadores si estaban en el lugar para averiguar por “el ataque del sábado por la mañana”.
El testigo le indicó a las autoridades que el 21 de marzo, al despertarse a las 6:00 a.m. escuchó los “gritos espeluznantes” de una mujer: “¡No!, ¡no! Duele”. Aseguró que todo ocurrió en el patio de Gretchen Anthony.
Entre tanto, otra persona del sector le dijo a los agentes que también escuchó los gritos de la mujer y que vio en el exterior de su casa el automóvil de David Anthony, exesposo de la maestra. Agregó que le llamó la atención haber visto una lona en la parte trasera de un carro.
Con todos estos testimonios la Policía emitió orden de captura contra el hombre, siendo detenido el pasado 31 de marzo cuando se movilizaba en un Nissan en Las Cruces, Nuevo México. David Anthony fue arrestado y acusado de homicidio en segundo grado y secuestro.
“Durante la investigación, un perro especialista en detección de cadáveres recorrió la residencia de Gretchen Anthony y nos alertó. El 31 de marzo, los investigadores hallaron a David Anthony y a su vehículo, un Nissan Frontier negro, en Las Cruces, Nuevo México, donde fue arrestado por homicidio de segundo grado y secuestro. Mientras resguardábamos su vehículo como prueba, una unidad canina experta en detección de cadáveres también nos alertó sobre la camioneta», explicó en un comunicado la Policía de Jupiter.
Por último, se estableció que las autoridades se encuentran en la búsqueda del cuerpo de Gretchen Anthony.
TOMADO DE SEMANA.COM
