Por: Francisco Parada Walsh/
Lamentablemente en la reunión entre el Presidente de la República y “La élite” o la “Cosa Nostra” de El Salvador, no aparecen todos ¡Lo sucedido es terrible! nuevamente “La élite” aparece enmascarada, ese grupo que de un plumazo robó las tierra ejidales.
“La élite” de esa foto donde aparece el poder real de un país fue, es y será histórica, nuevamente “La élite”, es discreta, nada que envidiarle a las familias sicilianas, ¡La discreción ante todo! Pero que no aparezca el presidente de la gremial más importante dice todo: A “La élite” no le importa el comerciante informal, la micro y mediana empresa ni las empresas agremiadas en esa asociación; sencillamente cuidan sus intereses personales y familiares, abordaron al presidente y jamás intercedieron por otros.
¿Tan poderosa es esa élite?: Son más que poderosos, les llamo el SUPRAPODER, esos forajidos que asaltaron comunidades indígenas y con el beneplácito de Rafael Zaldívar allá por 1881 y 1882, fue éste que promulgó una serie de leyes de extinción de ejidos y tierras comunales que permitieron la expropiación de las tierras de las comunidades indígenas; nada es ajeno en esta debacle, lo único común son los métodos utilizados para eliminar al adversario, líderes campesinos como Ama y Martí fueron asesinados con la mayor barbarie posible, nada ha cambiado, nada, siguen asesinando familias pagando salarios de miseria, ¡Eso son ustedes! Algo que pude ver fue que todos esos hombres sentados en finos sillones y engalanados por elegantes trajes italianos, sus manos eran de un color rojizo sangre.
Son tan crueles que evadieron impuestos por siempre y ahora quieren aparecer como los redentores de un país que huele a corona de ciprés, jamás se preocuparon por el pobre y ahora ¡Menos! Según la revista ECA publicada en julio del 2002 se hace referencia al Bloque Hegemónico empresarial y describe a los grupos más poderosos del país fundamentados en núcleos familiares, entre éstos la revista menciona: Red familiar Dueñas/Palomo, Núcleo familiar empresarial Kriete, núcleo familiar Palomo/Déneke, núcleo familiar empresarial Araujo Eserski, núcleo empresarial Meza Ayáu, núcleo familiar empresarial Meza/Hill, Núcleo familiar empresarial Cristiani/Llach, núcleo familiar empresarial Bahaia, red familiar empresarial Simán Jacir, núcleo familiar empresarial Salume Barake, núcleo familiar empresarial Belismelis, núcleo familiar empresarial Sol Millet, núcleo familiar empresarial Salaverria Prieto, núcleo familiar empresarial Quirós Noltenius, núcleo familiar empresarial Poma, núcleo familiar empresarial Llach Hill y algunos “capitanes”.
En esa reunión asaltaron casa presidencial, nada de extrañar; uno de los que aparece en esa épica foto ni idea tenía que podía codearse con la élite como es el caso de un hombre que su habilidad era cortar finos salamis, jamones y otros delicatesen y que en los corredores del Club Campestre le apodan “El carnicero”.
Ustedes prefirieron invertir en tanques, metrallas y muerte mientras mi vecina Costa rica invirtió en salud y educación, no hablamos de los tiempos de Zaldívar, sino hace setenta años, ¡Que apuesta más triste! Mientras mi pueblo es copado día a día por el hambre y la violencia que la Fuerza Armada y policía ejerce que ni en tiempos de la guerra vivimos, ustedes tienen no solo las tierras ejidales sino a la empresa privada sometida y a su mayor representante totalmente ausente; tristemente el pueblo se regocija de ver una solución al final del túnel pero no entendemos que yo, él y aquel que pertenecemos a esa empresa privada informal luchando por un país mejor no somos ni por cerca representados por esa “élite” ; no , decidieron ustedes como buenos piratas asaltar al galeón cargado de ilegalidades, de sueños y pesadillas, de amores y violencia, de ilusiones y decepciones; nada ajeno a ustedes, nada; tristemente la empresa privada no la representan ustedes caballeros de la oscuridad, ustedes representan ¡Solamente sus intereses!
¿Qué tal pagar todos los impuestos evadidos y eludidos desde que tienen memoria?: Tema intocable, o ¿Tan diferentes somos?: No, somos frágiles solo que yo entiendo a mi hermano, somos miserables como cualquier ser humano, me incluyo en esa descripción a diferencia que mi miseria es escasa comparada con la vuestra; ustedes deben entender que esta tragedia que vivimos con solo tronar sus dedos y pagar deudas históricas todos los sectores sociales estarían a salvo, cansado estoy de ver las mismas caras y el mismo dinero, no aportan nada solo que su foto junto al presidente dice quiénes son: “La élite”; Corleone y sus gatilleros aparecen, cargan sus armas y algo muy propio de su empresa es que usan silenciador para ejecutar al pobre, nunca se oye aquel grito lejano y hermano, muere poco a poco, se muere de hambre, de desempleo, mordidos por cascabeles en los desiertos del mal; ustedes cobran por entrar a sus bancos, a sus fauces, a sus centros comerciales, hoteles y más. Para mí y en mi sencillez la persona más importante es el pobre, el paciente abandonado, el niño que perdió a su nana en el parto, el joven que acaba de desertar de su escuela y vuelvo al más necesitado.
¿Qué dicen de ese desprecio a la empresa privada?: Nada, tristemente el presidente de la misma visitó mi montaña, ocupaba un slogan de poca monta, algo así como “Mi gente”… “Tiene hambre”, hombres aparentemente brillantes y que no conozcan la realidad del campesino dice mucho y poco del interés de conocer la dura realidad del salvadoreño y realmente resulta asqueroso y no discrepo con ustedes si decidieron no invitarlo pues ofensa a la inteligencia para mi gente es preguntarle a mi campesino cómo está su economía si basta conversar con su motorista si le alcanza el salario y no venir a ofrecer sueños a mí montaña. Ese es nuestro país, hordas de bárbaros que hacen a un lado a miles de empresas y a su líder con tal de seguir y hacer saber quién es quién. El Supra poder, oligarquía, élite y el infierno son sinónimos; antónimos serían lo bueno y lo excelso y esas son palabras ariscas a su léxico
Gracias a cada uno de los personajes de esa foto histórica pues me ayudan a entender que nada ha cambiado, nada; “La élite” se reinventa, sufre por ratos, es como un camaleón pero logran capear temporales, virus, hambrunas y en momentos de crisis aparecen públicamente y muestran sus rostros, colmillos, cachos y cola con tal de seguir siendo ese poderosísimo Bloque hegemónico. Elites de criollos, dueños de cielo, mar y tierra; no los envidio ni en lo más mínimo, allende de sus grandes tribulaciones ni por un segundo quisiera calzar mocasines Salvatore Ferragamo que escurren sangre, finos trajes Fioravanti que huelen a rapiña y los paga el pobre, ese pobre y sencillo ¡Que cree todavía en ustedes!. “Es más fácil sacarle sangre a un punche que un rico entre al reino de los cielos”.
