Por: Elio Masferrer Kan
En estos momentos Venezuela está en las grandes planas de la prensa internacional con motivo de las elecciones a la Asamblea Nacional integrada por 277 diputados. Este órgano legislativo cobró fama cuando fue ganada por la oposición política e inició un intento de destitución del presidente Nicolás Maduro, quien se mantiene en el cargo y refrendado recientemente en un proceso electoral en el que hubo tres candidatos presidenciales: Maduro, Falcón y Bertucci. En este caso nos interesa particularmente el pastor y empresario Javier Alejandro Bertucci Carrero, de 51 años, quien fundó la Iglesia Maranatha Venezuela. Como empresario tiene inversiones en Venezuela y la República Dominicana. Fue postulado por el partido político El Cambio y obtuvo el 10.82% de los votos (1.015.895 sufragios).
Bertucci es un personaje controvertido, en 2010 fue acusado de intentar contrabandear 5,000 toneladas de diesel y cumplió arresto domiciliario en su Iglesia donde podía predicar libremente. Es un empresario exitoso que utiliza parte de sus ganancias para financiar su campaña electoral donde incluye repartos de alimentos y productos básicos de consumo popular. En 2016 fue mencionado en los Panamá Papers y señalado por consultar en el famoso Despacho Mossak Fonseca para implementar operaciones a través de una paper company, Bertucci reconoce que hizo la consulta pero afirma que no realizó ninguna operación.
Este pastor se presenta como “la luz en las tinieblas”, trató de derrotar a Nicolás Maduro. Propone levantar el control cambiario y de triunfar no gobernará ni con el chavismo, ni con la oposición.. Mediante cadenas dominicales de radio y televisión se propone implantar valores cristianos. Está en contra del matrimonio igualitario, pero reconoce que en una comunidad democrática esta medida debe resolverse mediante un plebiscito. En el caso del aborto sólo lo acepta si está en riesgo la vida de la madre o por razones terapéuticas. Propone que los venezolanos se transformen en cristianos devocionales en una sociedad con valores cristianos.
Existen además en Venezuela iglesias evangélicas que critican con dureza a Bertucci y respaldan a Guaidió. El Consejo Evangélico de Venezuela se alinea contra el chavismo y llama a una guerra espiritual, señalando a esta fuerza política como influida por el culto afrovenezolano a María Lionza:
“Para el pastor Jaime Botello, este evento no fue meramente humano y queda demostrada la intervención del Señor con su fuego santo, donde los altares edificados en esta montaña en honor a estos dioses falsos fueron quemados. El Señor, ciertamente destruyó las fortalezas satánicas, de eso hay testimonios, ese día se vieron columnas de humo que subían desde la montaña, porque estábamos en la plazoleta frente a la montaña de Sorte, que son aproximadamente 20 minutos desde donde estábamos clamando”.
La doctora Y. Mancilla en su trabajo de campo en Venezuela encontró que un sector importante de quienes respaldaban a Chaves viven en barrios populares donde se mezclan propuestas sincréticas de cultos afros, teología de la liberación católica y expresiones de religiosidad popular, incluso corrientes del mundo evangélico. Este respaldo a Maduro no es reconocido por las corrientes conservadoras evangélicas.
Las elecciones de 2020 a la Asamblea Nacional
En las elecciones legislativas del 6 de diciembre de este año las fuerzas políticas fueron mas diversas que en las presidenciales. Además del Polo que apoyaba a Maduro se presentó una propuesta a su izquierda bajo en nombre del Partido Comunista y una alianza de antiguos contrincantes como donde confluyeron Henry Falcón y Javier Bertucci, partidos como COPEI (democracia cristiana católica), Acción Democrática y El Cambio, entre otros, Esta alianza obtuvo el 17.95% de los votos (944.665 sufragios). El pastor Bertucci fue elegido diputado por Carabobo.
Hubo también pastores evangélicos que respaldaron al chavismo bajo la denominación del Movimiento Cristiano Evangélico Venezolano, quien fue desautorizado por el Concilio Nacional de Asambleas de Dios, en su comunicado también critican a Bertucci tratando de desconocer el proceso electoral:
“han sido variados los aspirantes del “evangelismo político” que, tratan de captar el voto cautivo de algunos cristianos evangélicos para buscar una negociación eficaz con el Estado, en aras de su propio beneficio. Hasta hoy, algunos de esos partidos que iniciaron sobre la base de su filosofía cristiana, no han podido cristalizar sus propósitos y han sido muy pocos los votos obtenidos en los diferentes comicios electorales: ORA, NUVIPA, Esperanza por el Cambio, y ahora MOCEV. Sin embargo, han causado confusión y hasta diferencias marcadas, en el seno de algunas iglesias evangélicas.”
https://verdadyvida.org/asambleas-de-dios-de-venezuela-fija-posicion-respecto-al-mocev/
Es importante mencionar que NUVIPA es un partido político evangélico que apoya a Guaidió, quien se autodenomina “presidente encargado” https://verdadyvida.org/nuvipa-suscribe-el-pacto-de-la-unidad-nacional-propuesto-por-guaido/
En definitiva queda claro una vez más, que los ciudadanos de los países latinoamericanos, creyentes y no creyentes, tiene distintas formas de ver el mundo y la política, y son de derecha, de izquierda y centristas al margen de su religión.
*Profesor Investigador emérito ENAH-INAH, doctor en antropología
