Por Karen Funes.
El 62.8 % de las remesas familiares son liquidadas por empresas dedicadas a las transferencias monetarias. En segundo lugar figuran las agencias bancarias.
De Estados Unidos es precisamente de donde vienen la mayor parte de las remesas a El Salvador. En el primer semestre de este año han representado el 95.4 % del total, es decir, $3,491.3 millones.
Carmen M. González envía concienzudamente remesas a su madre en El Salvador. Esta salvadoreña, ahora establecida en California, utiliza principalmente la estadounidense MoneyGram, que puede enviar remesas a más de 200 países y que cuenta con 3,500 sucursales. «Lo uso desde mi teléfono con una aplicación, es bien instantáneo y la comisión es menor. También he enviado a Irlanda donde lo pueden cobrar en efectivo o hago el depósito en cuenta bancaria», dijo.
«Otros como Ria, Remitly, PayPal es bien tardado que suelten la plata en el país porque tienen muchos protocolos de seguridad hasta por cantidades pequeñas», añadió.
La ventaja de estas empresas es que no requieren del receptor una cuenta bancaria, solamente un documento de identidad (DUI en El Salvador). Aun así, Moneygram, por ejemplo, puede hacer transferencias a cuentas de la banca tradicional virtualmente o vía llamada telefónica. Aunque empresas como Western Union cuenta con 572 agencias en el país, sin duda la digitalización en tiempo de pandemia ha facilitado más las transferencias.
Cifras del Banco Mundial indican también que el costo promedio por envío de remesas a El Salvador fue de 2.8 % en 2020, el más bajo de Centroamérica, disminución significativa en relación a 2012 que era de 5.3 %.
Según el Departamento de Estudios Económicos de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES) en su informe de julio «el costo de enviar remesas a los países de la región de Centroamérica muestra un claro descenso en la tendencia observada de 2011 a 2020, con la particularidad de que en Costa Rica y Nicaragua se incrementaron en 2020». De hecho, en Guatemala el costo es de 3.9 %, Nicaragua 4.4 %, Honduras 4.6 % y Costa Rica 6.6 %.
El 62.8 % de los salvadoreños prefieren las empresas remesadoras a los bancos y a otros métodos de transferencias en el primer semestre de 2021. Así lo reflejan los datos del Banco Central de Reserva (BCR), en los cuales desde 2019 se puede ver un aumento en las remesas y en dicha preferencia: en 2019, $1,583.4 millones ingresaron por empresas remesadoras y en 2021 $2,297 millones. Este año el 35.2 % eligió la banca tradicional, 1.7 % el efectivo y 0.3 % las recargas por teléfono.
María Saravia también envía remesas desde Nueva York, pero ella utiliza una aplicación llamada Xoom de PayPal, que le permite depositar dinero en la cuenta de su madre. Sin embargo, esta le cobra $8.99 por cada $100.
El estudio de FUSADES retoma datos de la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense (American Community Survey, ACS, por sus siglas en inglés), cuando la población de origen hispano en Estados Unidos era de 60.5 millones de personas en 2019, siendo 37.2 millones de origen mexicano. Y según datos disponibles para El Salvador, este ocupaba el primer lugar entre los centroamericanos en 2017 con 2.3 millones, que para 2020 se cree ronda los 3 millones.
Sin embargo, el mayor receptor de remesas en Centroamérica es Guatemala, que al cierre de 2020 registró $11,342 millones. El Salvador recibió $5,929.9 millones, pero FUSADES estima que para este año llegue a $7,328 millones y representen casi el 28 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Los municipios que más remesas recibieron (en millones) durante este semestre fueron: San Salvador, $366.6; San Miguel, $253; Santa Ana , $149.6; Usulután, $101.7; y Soyapango, $91.6.
Fuente: El Economista.
