El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva visitará Manaos, capital del norteño estado de Amazonas, para participar en actos de campaña como candidato del Partido de los Trabajadores (PT) a las próximas elecciones.
También participará en el acto Todos Juntos por Brasil y Amazonas, y se reunirá con 35 entidades y movimientos sociales para hablar de desarrollo sostenible en la región.
Para mañana está prevista la asistencia del líder petista al acto Todos Juntos por Pará en el Espacio Náutico Marine Club, en Belém, capital de la división territorial.
En la misma jornada participará en la Ley de Cultura con Lula, en el Teatro de la Paz.
De acuerdo con la agenda de recorrido, el exdirigente obrero estará presente el 2 de septiembre en el acto Todos Juntos por Maranhão, estado en el nordeste del país.
La víspera, el abanderado presidencial platicó en Sao Paulo con gobernadores, exgobernadores y representantes de fuerzas de seguridad para debatir propuestas para el área de su futura administración.
«Estamos proponiendo la creación del Ministerio de Seguridad Pública, sin que haya ninguna interferencia en la política del Estado. Lo que queremos es aumentar la participación de la Unión sin interferir en lo que es obligación de los estados hoy», detalló.
La cartera de Seguridad existió durante el gobierno de Michel Temer (2016-2018), pero en la actual gestión del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro se incorporó al de Justicia.
Además de ese ministerio, Lula prometió anteriormente crear el de la Mujer, de los Pueblos Originarios, de la Igualdad Racial y reactivar el de la Cultura.
De igual manera, el extornero mecánico aseguró que en un eventual gobierno hará valer el Estatuto del Desarme.
La legislación aprobada en 2003 cambió las reglas de porte y posesión de artefactos bélicos, con el objetivo de reducir la circulación de armas en el país.
Por unanimidad, el Tribunal Superior Electoral decidió ayer prohibir el porte de armas en el referendo. La excepción son los miembros de las fuerzas de seguridad que trabajen en esa jornada y sean requeridos por alguna autoridad para entrar en una determinada sección.
El relator Ricardo Lewandowski determinó que, dos días antes del sufragio y en las 24 horas siguientes, nadie se acerque armado a menos de 100 metros del lugar de votación, a no ser en caso excepcional de los policías.
La primera vuelta presidencial está prevista para el 2 de octubre, cuando 156 millones 454 mil 11 de brasileños acudan a las urnas para elegir al presidente de la República, gobernadores, senadores, diputados federales, estaduales y de distrito. (PL)
