La oposición en El Salvador sumó fuerzas contra la reelección del presidente Nayib Bukele y reiteró la inconstitucionalidad de la continuidad en el cargo.
La situación es reflejada por medios de prensa en comentarios de sectores opositores, de diferentes tendencias en el país.
El diario El Mundo citó al diputado de Nuestro Tiempo (centro) John Wrigt Sol, quien al valorar recientes declaraciones del vicepresidente Félix Ulloa sobre el tema dijo que a este le delegaron la función “de defender lo indefendible”, al decir que Bukele estará corriendo por un “segundo mandato” y no por la reelección, la cual, dijo, está prohibida por Constitución.
Por más piruetas que hagan con el lenguaje jurídico, la Constitución es muy clara que el mandato presidencial es de cinco años ni un día más, expresó Wright citado por el diario.
Mientras el diputado por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) Jaime Guevara indicó que la opinión de Ulloa “es un insulto a la inteligencia del pueblo salvadoreño, es una burla a la opinión de la población salvadoreña”.
Asimismo, el parlamentario René Portillo Cuadra, de Alianza Repúblicana Nacionalista (derecha), estimó que las declaraciones de Ulloa buscan generar confusión. Él –dijo- no lo hace por ignorancia, él pretende confundir a la población salvadoreña, la reelección presidencial continua está prohibida, puntualizó.
La Constitución establece que la “alternabilidad en el ejercicio de la presidencia es indispensable para el mantenimiento de la forma del Gobierno y del sistema político. Más claro, subrayó, imposible.
En contra de estas ideas se manifestó el jefe de fracción del oficialista partido Nuevas Ideas en la Asamblea Legislativa, Christian Guevara, quien elogió al vicemandatario y dijo que es uno de los abogados “más reconocidos del país, sumamente culto, constitucionalista, un hombre de primer nivel” y que será el electorado quien decida si vota por otro periodo.
El tema electoral en el país está a la orden del día con diferentes frentes de opinión desde la participación presuntamente inconstitucional de Bukele y el papel del Tribunal Supremo Electoral (TSE), hasta el voto en el exterior y la transparencia de los comicios.
Hay dudas sobre la labor del TSE como rector y garante del proceso electoral, y algunos sectores de opinión lo señalan como plegado a los intereses del gobierno.
No obstante, el oficialismo y aliados como el partido Gran Alianza por la Unidad Nacional, que fue la sombrilla de Bukele para ganar en 2019; y el Partido de Concertación Nacional, defienden a ese órgano ante la desconfianza manifiesta por la oposición que valora el foro no es imparcial y teme aplicar la ley. (PL)