Mi pueblo pobre, mi pueblo triste con capacidades y dones excepcionales, sencillo pero digno; con muchas historias contra la injusticia, con victorias y derrotas; ahora yace postrado por un constructo mesiánico, que lo mantiene adormecido y sonámbulo. Sometido y boquiabierto a una dictadura del like, se deja llevar por el deslumbrante espectáculo donde la realidad se convierte en reality bien montado.
Por: Miguel A. Saavedra
Se encuentra jodido; pero no se da cuenta, ni quiere saber el porqué; vive encajonado en una realidad virtual que lo distraen de sus propias falencias; realidades crudas y vivas que lo mantienen analfabeto y semiinstruido.
¡Nada es para siempre, sobreviviremos otra vez¡
Aunque mi pueblo se halle atrapado y ciego, sepan que hay quienes luchan por sacarlo de la ignorancia y enseñarle a ver la verdad en todo su esplendor. A pesar de que mi pueblo se halle sumido en las sombras, aún brilla una luz de esperanza que iluminará su camino de vuelta a la claridad
No todo está perdido, hay quienes combaten el letargo mesiánico con su voz, esforzándose por despertar las conciencias.
Como David ante Goliat, enfrentan el imperio digital con heroísmo, aspirando a un despertar colectivo que salte de la red zombi hacia la verdadera luz.
Así, aunque la esperanza parezca ahora remota, mi pueblo hallará el camino de regreso a su ser, despegando de la oscuridad hacia la claridad del mañana. ¡Bienvenidos a la luz, nuevamente¡.
La esperanza es la llama que iluminará su rumbo hacia un porvenir más justo y verdadero; convirtiendo tinieblas en resplandor; ¡porque la oscuridad, también tiene su tiempo¡.
Motivacional:
“Mi querido pueblo, sé que estos tiempos son difíciles y que la oscuridad parece haberse apoderado de nosotros. No perdamos la fe, porque juntos encontraremos el camino de regreso a nuestro ser. La esperanza es la luz que nos guiará a través de la oscuridad hacia un mañana más brillante.
¡Bienvenidos a la luz, nuevamente!
Sigamos adelante con valentía y determinación, porque aunque el camino parezca difícil, sabemos que la victoria final es nuestra.
Recordemos siempre que “la oscuridad también tiene su tiempo”, porque al final, siempre prevalece la luz. Por eso, les pido que mantengamos encendida la llama de la esperanza en nuestros corazones y trabajemos juntos para construir un futuro más justo y verdadero para todos.
¡Unámonos en este camino hacia la luz y demostremos que juntos podemos superar cualquier obstáculo! Este es nuestro momento, nuestra oportunidad de brillar y dejar atrás la oscuridad. ¡Vamos adelante, con la esperanza y la fe como nuestra guía y la determinación como nuestro motor!
¡Unámonos y juntos/as, iluminaremos el camino hacia un futuro mejor!”.
“Acompáñame en este camino hacia la luz. Únete a nuestro movimiento y juntos/as, construyamos el futuro que merecemos. ¡No perdamos más tiempo, la esperanza nos está esperando! Porque el momento es Hoy ¡Únete ahora!”.