Deadpool no fue el primer personaje en llamarse el salvador o el elegido, pero lo hizo con una mezcla de sarcasmo y desdén que lo distingue. La idea del elegido, un ser destinado a salvar o transformar el mundo, es un tema recurrente en la narrativa popular y la mitología. Este arquetipo ha sido explorado en diversas formas de arte y literatura a lo largo de la historia, y su presencia es particularmente prominente en el cine y los cómics modernos.
Por: Fabian Acosta Rico*
E n la ciencia ficción, la figura del elegido se presenta de manera prominente en Dune, una novela escrita por Frank Herbert que fue adaptada al cine. En la segunda entrega de la saga, Dune: Messiah, Paul Atreides asume plenamente su rol como el elegido, el Muad’Dib, quien está destinado a liderar a los Fremen, el pueblo del desierto del planeta Arrakis. La narrativa explora su transformación y las implicaciones de su destino como salvador de su mundo.
Otro ejemplo notable de la figura del elegido en la ciencia ficción es la saga Star Wars. En las tres precuelas de la serie, escritas y dirigidas por George Lucas, Anakin Skywalker es revelado como el elegido según las profecías Jedi, destinado a traer equilibrio a la Fuerza. La idea del elegido en Star Wars se entrelaza con temas de destino, poder y redención, subrayando la importancia de este arquetipo en la narrativa de la saga.
La figura del elegido también se presenta en Matrix, una película que ofrece una visión contemporánea del arquetipo. En este film, Thomas Anderson, conocido como Neo, es descubierto por Morfeo, quien lo identifica como el elegido para liberar a la humanidad de la Matriz. Neo es visto como el salvador que tiene la habilidad de manipular el metaverso creado por las máquinas para controlar a los humanos.
La figura del elegido es un tema común y recurrente, especialmente en las sagas modernas. Sin embargo, la reciente película de Deadpool y Wolverine ha causado controversia entre ciertos sectores conservadores cristianos, que han acusado al personaje de blasfemia. La reacción ha sido tan fuerte que incluso se ha intentado cancelar la película, un reflejo del poder y la influencia de las críticas en la era digital.
Aunque el cristianismo no tiene el monopolio sobre la figura del elegido, los cristianos consideran a Jesús como el único verdadero redentor. Esta visión excluye cualquier intento de ridiculizar o parodiar la figura de Jesús. Deadpool, conocido por su irreverencia y actitud provocadora, se presenta en la película como el salvador del universo Marvel y, de manera provocativa, se autodenomina el Jesús de Marvel. Este acto de desafiar la sacralidad de Jesús ha generado una fuerte reacción entre algunos cristianos.
Un caso histórico similar al de Deadpool es el de John Lennon, quien en 1966 hizo una declaración controvertida al afirmar que los Beatles eran «más populares que Jesucristo». Esta afirmación provocó una reacción negativa entre los cristianos y subrayó cómo las declaraciones sobre figuras sagradas pueden tener consecuencias significativas. En la era digital, estas reacciones pueden amplificarse rápidamente, como ocurrió con la película de Deadpool.
Tras el estreno de la película, dos jóvenes religiosas publicaron en Internet que la película promovía el satanismo y valores anticristianos. En un video que compartieron en las redes sociales, afirmaron que el film estaba «hecho por el Diablo» debido a las afirmaciones blasfemas de Deadpool. Estas jóvenes no pudieron ver la película completa debido a su contenido sacrílego y recomendaron a los cristianos evitarla. Además, se mostraron especialmente indignadas por una escena en la que Wolverine es crucificado, una referencia a una portada de cómic que consideran ofensiva.
A pesar de la controversia y los intentos de boicot, las películas exitosas rara vez sufren un impacto negativo significativo debido a las críticas. Marvel Studios y Disney, que producen las películas de Deadpool, no se pronunciaron oficialmente sobre la polémica. La falta de respuesta pública puede interpretarse como una estrategia para no darle más relevancia a la controversia, considerando que es una anécdota en el contexto más amplio de la cultura pop.
La controversia también ha llevado a que algunos padres de familia pidan la retirada de Deadpool de Disneyland, argumentando que es un mal ejemplo para los niños. La clasificación C de las películas de Deadpool refleja esta preocupación, y muchos adolescentes que querían ver la película tuvieron que buscar copias ilegales debido a las restricciones de edad en los cines.
Es evidente que existe un sector del cristianismo que rechaza vehementemente las representaciones irreverentes de figuras sagradas. Este grupo, a menudo compuesto por adultos y jóvenes que practican su fe con fervor, puede ser muy activo en las redes sociales. Sin embargo, se trata de una minoría comparada con la masa cristiana más general, que tiende a tener una fe menos intensa. Para la mayoría, Deadpool es simplemente otro personaje en la vasta lista de figuras mesiánicas en la cultura popular, sin causar un gran impacto en su percepción de la figura de Jesús.
En resumen, la figura del elegido es un arquetipo profundamente arraigado en la narrativa cultural, pero su uso en el contexto moderno puede provocar controversias, especialmente cuando se relaciona con figuras sagradas. La respuesta a la película de Deadpool refleja cómo las interpretaciones y reacciones pueden variar ampliamente, desde la indignación ferviente hasta la indiferencia.
*Universidad de Guadalajara – México