(Por: Róger Hernán Gutiérrez*)
Luego de más de 50 días en el cargo, la cartera de trabajo del actual gobierno, sigue dando señales que va por rumbos que aún no se sabe con precisión a donde apuntan “asegura que su bandera será ceñirse a la legislación como horizonte de trabajo; sin ningún rasgo partidario; sin inclinarse al lado de los empresarios, ni de los sindicatos, para estos últimos por la diversidad que los caracteriza y porque los conoce, estaría sirviéndoles con diligencia—sobre manera aquellos que demuestren ser auténticos, insiste mucho en calificar a las organizaciones sindicales con ese calificativo y que no estén apadrinados o amadrinados por partidos políticos ni fuerzas fácticas”.
Además luego de semanas sin comunicarse con el movimiento sindical “variado”, en tanto lo hizo primero a partir de su propio interés y en un manejo mediático como estrategia similar a su jefe—fuimos convocados en el mes de junio “los diferentes grupos sindicales” para escuchar un mensaje en mucho demagógico, tratando de hacerse ver como el paladín de los derechos laborales—es decir está nombrado para salvarnos del “caos” al que llevaron los gobiernos anteriores. En ese momento sólo quería que fuéramos todo oído para apoyarle en su rescate de la administración laboral, y que iba a Ginebra a la Conferencia Internacional de la OIT en una misión imposible—que decidió aceptar—para tratar de desbloquear la queja sindical de la empresa privada.
Las diferentes solicitudes de audiencia han llegado a granel, lo que sólo demuestra la necesidad de dialogar y ponerse en sintonía para resolver problemas laborales de diversa índole, que tienen como causa las relaciones sociales de producción de explotación laboral y la violación sistemática de derechos laborales que ejercen los dueños de las empresas, esto lleva a que constantemente haya movimiento (peticiones y demandas) ante la cartera de trabajo; y que el actual Ministro de Trabajo pretendería resolver. Y acumuló las diferentes audiencias hasta hacerlas efectivas el día 26 de julio/2019— ¿lo hizo en importante fecha histórica del movimiento guerrillero cubano M-26 julio? no sabemos; pero si con clara manipulación.
Las que fuimos citadas en distintos horarios, nuestro agrupamiento sindical esperó para su audiencia (10:00)—más de una hora—siendo trasladados de un lugar a otro a través de edecanes que sólo demuestra la innecesaria burocracia que envuelve a los ministros del gabinete—en concreto mala diplomacia, irrespeto, prepotencia, dilapidación de recursos públicos—y de acuerdo a su expresión personal lo puede hacer en tanto el 80% de la población “avala” lo que la Presidencia de la República está haciendo.
La entrevista fue cordial, algo tensa en sus inicios por la tardanza en iniciarla—su fin, del Sr. Ministro, no desaprovechar el espacio para comunicar el discurso oficial, cargado de palabras de salvamento y de insistir en la autenticidad de los movimientos organizados de trabajadores(as) como requisito para dialogar con sinceridad y franqueza, y claro diciendo todo lo que pudo para minimizar y nombrar despectivamente cuanto pudo, las actuaciones del gobierno anterior en dicha cartera. Palabras necias que cayeron en oídos sordos en la mayoría de la audiencia sindical, no íbamos a eso; y no porque la anterior Ministra de Trabajo, no hubiese tenido yerros para administrar la cartera de trabajo, sino por cuanto es de mal gusto—decir algo del anterior sin aún demostrar que lo va hacer mejor, hasta ahora huelgan las palabras y peor aún las marcadas de un oficialismo ciego y hasta tonto.
Interrumpió la conversa, tratando de marcar el territorio, no era posible permitir un diálogo donde la figura del Ministro no se viera como protagonista, sabemos que es una persona con cierto ego, que no sabemos si podrá contribuir a que el modelo de trabajo y de relaciones laborales se mejore, habrá que esperar, en tanto ese mismo garbo no se le nota cuando habla con los empresarios, donde el exceso de diplomacia es obvio.
Se expuso la visión que como grupo sindical queremos ofertar a la población laboral el próximo 13 de agosto/2019, se le extendió la invitación correspondiente y se le pidió si podía mediar en hacer llegar la invitación y hacerla del conocimiento del Señor Presidente de la República.
El Ministro habló de que no es su intención sentar posición sobre temas específicos que preocupan al movimiento sindical—flexibilización laboral, en cuanto a horarios y jornadas, así como anteproyectos de ley en la Asamblea Legislativa—lo que no dice nada.
También pretendió intimidar de que nos conoce y que si queríamos confrontar no va ser un ministro represivo, sino que con el respaldo de la población hará lo necesario para que aflore “su verdad” y se transparente la realidad laboral. El reto está planteado y aún no se manifiestan mecanismos claros de interlocución efectiva con la cartera de trabajo, y mientras no se concrete con claridad el ámbito laboral del país, continuará presentándose un panorama que nos lleva a amenazas e intimidaciones que sólo provocarán que la consigna “así como te pusimos, así te quitamos” vaya ganando correlación.
*Sindicalista salvadoreño