Según México, la nueva regulación, que se prevé entre en vigor en 60 días, establece que las familias acompañadas por menores deberán permanecer en centros de detención mientras se desahogan sus procesos migratorios.
De esa forma, la detención de menores podría prolongarse por tiempo indeterminado, toda vez que persiste la demora en la atención de casos migratorios.
De conformidad con el compromiso inquebrantable de México de proteger a niñas, niños y adolescentes migrantes, la Subsecretaría para América del Norte dará puntual seguimiento a las condiciones de esos centros y continuará brindando asistencia y protección consular a las familias mexicanas que sean detenidas bajo estas nuevas condiciones.
Finalmente, el Gobierno de México estará atento a la implementación de esta medida y a los procesos judiciales que se pudieran presentar en torno a su aplicación.
Asimismo, con el apoyo de los Grupos Asesores sobre Derechos Civiles de los Mexicanos en Estados Unidos se evaluarán las alternativas legales correspondientes, concluye la nota.