La Ley de Agentes Extranjeros impone un impuesto del 40% a la cooperación internacional. Para Loyda Robles, directora de fortalecimiento a la institucionalidad del Estado, transparencia y anticorrupción de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho, FESPAD, esto implica un ahogo financiero para las organizaciones.
A partir de la entrada en vigor de la Ley de Agentes Extranjeros se tendrán 180 días hábiles para que las asociaciones y organizaciones sin fines de lucro se registren, de lo contrario supondría la cancelación del estatus legal de una organización, multas de hasta 250 mil dólares o incluso penas, de dos a cinco años de prisión.
Esto genera una injerencia indebida y un acoso fiscal, según Robles.
Según Robles, los tres órganos del Estado responden a la agenda oficialista y al interés particular de un pequeño grupo que gobierna el país.
La especialista de FESPAD explica que la Sala de lo Constitucional, de la Corte Suprema de Justicia, ha resuelto permitir la reelección del presidente de la República, contrariando la misma Constitución vigente. La Asamblea Legislativa ha dado muestras de desinterés en la agenda de derechos humanos, archivando más de 300 propuestas de las organizaciones.
Además, el Legislativo ha entrado en una dinámica de replicar el discurso del Órgano Ejecutivo, sin un debate. Las iniciativas son aprobadas, abusando de la figura de dispensa de trámite y son aprobadas en madrugones.
En este contexto, Robles cuestiona: ¿Quién determina que estamos frente a una situación de contravenir el orden público, la soberanía nacional o la seguridad del Estado, como lo establece la propuesta de Ley de Agentes Extranjeros?
Loyda Robles, directora de fortalecimiento a la institucionalidad del Estado, transparencia y anticorrupción, de FESPAD, hizo énfasis en que la propuesta de Ley de Agentes Extranjeros se da en un contexto en que hay una relación conflictiva entre el Gobierno de Estados Unidos y el de El Salvador.
Además, advirtió que la cooperación internacional empezará a retirarse, como ya se está viendo en el país con la cooperación alemana y también como se ha visto en Nicaragua tras la aplicación de la misma ley en el país vecino.