El SORA-Q pesa aproximadamente 250 gramos y es casi del tamaño de una pelota de beisbol. Una vez toque la superficie lunar, se transformará en un vehículo con un mecanismo propio de propulsión para sortear terrenos irregulares y obstáculos.
La Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) y el fabricante de juguetes Takara Tomy han desarrollado un robot de exploración lunar como parte de la misión espacial SLIM (Smart Lander for Investigating Moon). Se trata de SORA-Q, un róver de forma esférica, ultracompacto, ligero y a la vez capaz de transformarse, anunció la compañía.
La decisión de JAXA para realizar semejante alianza se debe a la experiencia, tecnología y conocimientos de la también nipona para crear artefactos con tales características, ya que la empresa está detrás de la línea de juguetes Diaclone y Microman, que más tarde darían origen a la famosa franquicia de robots Transformers tras su asociación con la estadounidense Hasbro a principios de la década de 1980. En el proyecto también participa el gigante electrónico Sony y la Universidad Doshisha.
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本当に宇宙へ!
超小型の変形型月面ロボット『SORA-Q』の映像公開🌟
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タカラトミーがJAXA@JAXA_TansaX等と共同開発した
SORA-Q(ソラキュー)の紹介映像を本日公開✨SORA-QのHPはこちら▼https://t.co/ri79KdaN6m #JAXA #ソラキュー pic.twitter.com/BsrXXx11cS
— タカラトミー (@takaratomytoys) March 15, 2022
El SORA-Q —denominado por JAXA como LEV-2 (Lunar Excursion Vehicle)— pesa aproximadamente 250 gramos y es casi del tamaño de una pelota de beisbol (8 centímetros sin transformarse). Una vez descienda del módulo de aterrizaje SLIM y toque la superficie lunar, se transformará en un vehículo con un mecanismo propio de propulsión para sortear terrenos irregulares y obstáculos. Está equipado con una cámara frontal y otra trasera, para captar imágenes del entorno circundante y del área alrededor del módulo. Además, un sistema de comunicación Bluetooth le permitirá enviar datos y fotografías a la Tierra, explica la agencia espacial en una presentación.
Entre otros objetivos, la misión SLIM —programada para lanzarse en 2017 pero sujeta hasta ahora a múltiples retrasos— busca poner a prueba la tecnología de exploración de «microrobots» en el entorno de baja gravedad de la Luna y adquirir suficientes datos de su suelo para estudios de conducción autónoma y tripulada en el futuro. Asimismo, espera colaborar en los esfuerzos para que las tecnologías japonesas «cambien el juego» en la exploración espacial y la forma en que se lleva a cabo. (RT)