El Pacto Histórico comienza su carrera hacia la segunda vuelta electoral tras los resultados en los comicios de este domingo donde ganó, pero le faltaron votos para llegar a la presidencia colombiana.
Por: Odalys Troya
Datos preliminares de la Registraduría Nacional indican que, con prácticamente el ciento por ciento de las mesas escrutadas, Gustavo Petro obtuvo ocho millones 526 mil 352 votos que representan el 40,32 del total de boletas válidas.
En segundo lugar quedó el independiente Rodolfo Hernández, con cinco millones 952 mil 748 votos, el 28,15 por ciento, tal como vaticinaban las últimas encuestas, en las cuales sorpresivamente desplazó a Federico Gutiérrez del derechista Equipo por Colombia.
Configurado este nuevo escenario Petro y Hernández irán a balotaje el 19 de junio próximo, de acuerdo con la legislación del país.
Petro es un reconocido político y luchador que desde muy joven militó en el Movimiento 19 de abril (M-19, una guerrilla urbana que participó en el conflicto armado interno entre 1974 hasta 1990 cuando se desmovilizó en el contexto de un proceso de paz.
El M-19 se transformó en la Alianza Democrática M-19 (AD M-19), la segunda fuerza política más importante en la Asamblea Constituyente de 1991 por la cual Petro fue electo para ser miembro de la Cámara de Representantes en las elecciones de ese mismo año.
Petro es economista de la Universidad Externado de Colombia, especializado en Administración Pública y Master de Economía de la Universidad Javeriana, además de tener otros títulos.
En 1994 fue nombrado en la embajada de Colombia en Bélgica como agregado diplomático para los Derechos Humanos, cargo que ocupó hasta 1996.
Regresó a Colombia en 1998 y aspiró nuevamente a la Cámara de Representantes con el aval del Movimiento Vía Alterna que había fundado junto con otros ex militantes del Partido AD M-19.
Durante ese período, fue elegido el mejor congresista tanto por sus colegas como por la prensa nacional gracias a sus denuncias sobre corrupción y sus debates de control político, entre ellos el de Paramilitarismo en Antioquia.
Del año 2006 a 2010, fue senador de la república y en esa etapa destapó el escándalo de la llamada parapolítica, que demostraba vínculos de políticos con grupos paramilitares, hecho que lo llevó a ser elegido como el personaje político del año.
En 2012, fue elegido alcalde mayor de Bogotá cargo que ocupó hasta 2015 y en su administración se creó la Secretaría de la Mujer, se inauguró el Centro de Ciudadanía LGBTI, propuso como política de gobierno conservar los humedales de Bogotá y planificar para la preservación del agua ante el calentamiento global, entre otras iniciativas.
Luego, en 2018, fue candidato presidencial por el Movimiento Significativo de Ciudadanos-Colombia Humana y logró una votación histórica de más de ocho millones de votos, y en virtud del Estatuto de la Oposición, al alcanzar la segunda votación más alta en las presidenciales, pasó a ser senador, cargo que ocupa actualmente.
En las elecciones legislativas del pasado 13 de marzo, cuando se realizaron también las consultas interpartidistas, resultó electo como candidato del Pacto Histórico, con casi cinco millones de votos. Tras estos resultados nombró a la activista ambiental Francia Márquez como su compañera de fórmula para la vicepresidencia.
Es partidario de implementar el Acuerdo de Paz y avanzar en los diálogos con grupos armados como el Ejército de Liberación Nacional para poner fin a los conflictos internos en el país.
Asimismo, aseguró que, de triunfar en estas presidenciales, retomaría las relaciones diplomáticas con Venezuela.
Su programa de gobierno incluye a todos los sectores sociales del país, especialmente a los más desposeídos históricamente. (PL)