Para los parlamentarios opositores, los programas preventivos y contra la violencia impulsados por el Ejecutivo a través del Instituto Nacional de la Juventud cumplen un rol propagandístico.
El titular de Justicia demostró la falsedad de tales aseveraciones al destacar las relaciones entre las instituciones gubernamentales y las municipalidades con las que trabajan en actividades de prevención de la violencia.
‘Es totalmente falso que el trabajo preventivo tenga otra finalidad que la de coadyuvar a la reducción de la violencia y mejora de la calidad de vida de la población’, aseguró Ramírez.
Agregó que las acciones para prevenir la violencia tienen como finalidad brindar una mejor atención a la juventud, con una disminución de víctimas adolescentes y de jóvenes involucrados en el crimen.
‘Eso es gracias al involucramiento de más adolescentes y jóvenes en actividades educativas, escuelas de iniciación deportiva, dinamizando plazas y parques por medio de la cultura y trabajando en proyectos emprendedores’, destacó.
Por demás, la Asamblea Legislativa sigue sin aprobar los fondos provenientes de la Contribución Especial, por un monto de 13 millones de dólares destinados a las instituciones que trabajan en prevención de la violencia.
