(Por: Miguel A. Saavedra)
Todos estamos de acuerdo en combatir el flagelo de la corrupción y la impunidad con la que ésta se realiza en el ámbito de esferas de sectores con mucho poder económico y político; que por su desvergüenza, llega a acciones que bien podrían publicarse como una historieta de “aunque usted no lo crea” de Ripley.
La historieta podría decir: Aunque usted no lo crea: En El Salvador, el 5 de septiembre de 2018, el partido político protagonista de los más escandalosos actos de corrupción, ARENA y su candidato presidencial, proponen reformas legislativas para combatir la corrupción.
Hay que tener presente que militantes y prominentes funcionarios de dicho partido son actores principales, entre otros, de los casos FIINSEPRO-INSEPRO, Carlos Perla en ANDA, Majano en el ISSS, caso Infocentros con la expresidenta Ana Vilma de Escobar y los casos de los expresidentes Francisco Flores por los fondos desviados de Taiwán y Antonio Saca, actualmente en proceso judicial.
Siguiendo al famoso caricaturista estadounidense Robert Ripley se podría elaborar otra anécdota: Aunque usted no lo crea: En El Salvador el mismo día, 5 de septiembre de 2018, que el partido ARENA propuso reformas legales para combatir la corrupción, fue denunciado por el Secretario de Transparencia y Anticorrupción de la Presidencia, Marcos Rodríguez, ante la Fiscalía General de la República (FGR), para que investigue el presunto delito de lavado de dinero y activos de dos ONGs, que donaron a dicho partido cerca de 30 millones de dólares.
Como complemento, en la denuncia el funcionario señala que el Centro de Estudios Rodríguez Porth, fundado por ARENA y señalado como destinatario de los fondos de Taiwán en el caso del ex presidente Francisco Flores, entre 2003 y 2014 entregó a ARENA cerca de 22 millones de dólares y que la Fundación Libertad y Progreso, entre 2014 y 2015 le entregó casi $8 millones, en operaciones que por la forma en que se realizaron pueden tipificarse como delitos de lavado de dinero y activos.
Es evidente que esta iniciativa contra la corrupción del candidato a la presidencia licenciado Carlos Calleja, en una acción totalmente electorera, que al carecer de legitimidad histórica sólo pone en primera fila la demagogia de su partido ARENA.