(Por: Francisco Parada Walsh)
Se tomaron de la mano y caminaron hacia el puerto de La Libertad. Pocas veces como médico me he topado con algo que hice con las mejores intenciones y después de dos horas de batallar contra la muerte logré derrotarla en tres caídas con límite de tiempo pero hubo algo que parecía intrascendente y ese algo hizo que tomara una decisión: Aceptar un error, decir la verdad y ayudarle al paciente a que su problema en apariencia sencillo, fuera solucionado por un colega al que no conozco.
¿Cómo inicia la serie de acontecimientos?: Es viernes por la tarde, aparece mi amigo Álvaro cubriéndose con trapos una herida ocasionada con machete que no parece complicada, una vez que retiré los trapos ensangrentados pude ver que hay una sección total de la arteria principal del pulgar, era una hemorragia que a simple vista parecía sencillo controlar el sangramiento pero no fue así, después de media hora logré detener el sangramiento, luego me dediqué a suturar piel y terminar esa pequeña cirugía.
¿Qué sucede una vez terminada la cirugía y le digo al paciente que realice extensión y flexión del dedo pulgar de la mano izquierda?: Pudo realizar la flexión pero no la extensión; ¿En qué momento hubo sección del tendón?: Creo que el tendón venía seccionado parcialmente y debido a la imperiosa necesidad de controlar la hemorragia quizá lo seccioné completamente, es lo que se me ocurre pues ni loco hubiera suturado sabiendo que era imperativo la corrección del tendón cortado.
¿Cuál es mi DEBER?: Servir al paciente con honestidad, ética y ayudarlo en todo lo que de mí dependa pero ese DEBER implica aceptar un error que en un inicio no existía pero el DEBER me obligó a aceptar que el paciente debía ser referido para que no perdiera la movilidad completa (Flexión y extensión) del pulgar; por un momento pensé: “Si no te gustan que te mientan ¿Por qué le mentirás al paciente?”: Una vez contestada esa pregunta le dije al paciente: “Tiene que ser operado en el hospital de Chalatenango ya que se cortó el tendón y se le debe de reparar”; mientras, mi clínica parecía el lugar de una masacre.
¿Cuál es mi SER?: Ser honesto, sé que algunos pudieron o pueden criticar mi “Mala cirugía”; decir la verdad no es fácil pero uno de mis mayores logros personales es dormir con una conciencia tranquila y que mi corazón bombee sangre calientita, sangre como un caldo de pollo para mi alma; estar en el corazón de una decisión donde mi reputación o mi ego quedaba en el paredón de fusilamiento no es fácil pero ¿Qué es más importante?: ¿Mi reputación o el dedo de un paciente?: No lo dudo ni por un segundo, es más importante el dedo funcional de mi paciente por lo que lo referí al hospital nacional de Chalatenango. A continuación leerá la referencia que Álvaro paciente y amigo presentó en el hospital.
Nota. Estimado Colega: “Se observa herida de 4 centímetros de bordes irregulares presentando hemorragia masiva por sección de vaso sanguíneo de gran tamaño. Se le pide al paciente que movilice (Flexión y extensión del pulgar) observando que sí es capaz de realizar dichos movimientos. Se procede a ligar vasos sanguíneos con crómico 2-0, se lava herida con agua estéril, se procede a suturar piel con seda 2-0. Posterior a limpieza de mano, brazo y codo se le pide a paciente que flexione y realice extensión de dedo pulgar; se observa que sí puede realizar flexión de dedo pulgar pero no extensión por lo que se le indica la necesidad de que se le debe realizar tenorrafia del extensor del pulgar izquierdo (Falange distal).
Le reintegro los honorarios recibidos (40) cuarenta dólares y se le extiende esta referencia para que sea evaluado por cirugía y corregida la sección del tendón. Muy agradecido por la atención a la presente, a la vez manifestarle que paciente reside en frontera con Honduras llevándole cuatro horas llegar a centro asistencial por lo que ruego encarecidamente brindar la atención requerida. Atentamente. Firma y sello. Conclusión: Deber y ser se abrazaron, el DEBER como médico fue cumplido y el SER humano, SER honesto, SER sincero y ético y sobre todo humilde para aceptar puedo decir que valió la pena. DEBER Y SER CAMINAN HACIA EL PUERTO LA LIBERTAD, LIBERTAD FÍSICA Y LIBERTAD DE MI ALMA.