A continuación, los dos presenciarán la firma de varios acuerdos en distintas esferas orientados a dar impulso a la cooperación y los nexos mutuos.
Aparte de dialogar con Xi, Sánchez Cerén hoy estará inmerso en otros eventos formales que incluyen recorridos por sitios emblemáticos de Beijing como la céntrica plaza Tian’anmen y el mausoleo donde reposan los restos de Mao Zedong, líder del Partido Comunista de China y fundador del país como República en 1949.
El dignatario llegó a esta capital ayer y se convirtió así en el primer gobernante de El Salvador que viaja al gigante asiático.
Su agenda abrió este mismo miércoles con un encuentro en la universidad de Economía y Comercio Internacional con jóvenes de su nación y los vicepresidentes de cinco de las universidades chinas que atienden a los becarios.
Allí conoció y destacó las excelentes condiciones de las aulas y habitaciones donde estudian y conviven con otros alumnos.
Según lo previsto, mañana acudirá a las instalaciones de la embajada de su país aquí, antes de depositar una ofrenda floral ante el Monumento a los Héroes del Pueblo, reunirse con el primer ministro chino, Li Keqiang, y después con el presidente de la Asamblea Popular Nacional, Li Zhanshu.
Para el sábado 3 de noviembre prevé visitas a una comunidad de vecinos y a un parque de tecnología agrícola, y al día siguiente se trasladará a la ciudad de Shanghái, donde Xi Jinping agasajará con una cena de bienvenida a los gobernantes invitados a la primera Exposición Internacional de Importación de China.
Sánchez Cerén participará el 5 de noviembre en la inauguración de esa importante feria, que genera grandes expectativas porque será la oportunidad de revelar a este mercado asiático productos y servicios insignias para entonces concertar posibles negocios.
Luego de la apertura de la Exposición recorrerá el pabellón de El Salvador, con 25 empresarios de sectores como el cafetalero, azucarero y distintas ramas de la industria.
Más tarde irá al museo de Planificación Urbana de Shanghái y retornará a su país el martes 6 de noviembre.
El Salvador rompió a mediados de agosto las relaciones con la isla de Taiwán y las estableció con China, un acontecimiento histórico y acorde con la política de apertura al mundo impulsada por el gobierno de Sánchez Cerén. (PL)
