Ahora sabemos que las vacunas son inequívocamente buenas. Una de las preocupaciones más comunes en estos momentos por parte de los padres -cuando se trata de vacunar a sus hijos- es la sugerencia de que administrarle al niño un número múltiple de vacunas, ya sea al mismo tiempo o en un corto período de tiempo, puede abrumar el sistema inmunitario.
Lo cierto es que existe mucha investigación que demuestra que esto no es cierto, y un reciente estudio publicado en la Revista de la Asociación Médica Estadounidens, JAMA, proporciona más evidencia aún que confirma que este extremo. La conclusión del trabajo es tan tajante como sencilla: Los niños que reciben múltiples vacunas a una edad temprana no tienen más probabilidades de enfermarse en comparación con los niños que no están vacunados.
«Algunos padres están preocupados de que las vacunas múltiples en la primera infancia pudieran dañar el sistema inmunológico de sus hijos, haciéndolos más susceptibles a futuras infecciones», explica el autor principal Jason Glanz en un comunicado. «Este nuevo estudio sugiere que la teoría de sobrecargar el sistema inmune de un bebé es altamente improbable».