Los cuatro periodistas holandeses fueron emboscados y asesinados por el ejército de El Salvador el 17 de marzo de 1982. Trabajaban en IKON, emisora de televisión pública holandesa. Según la Comisión de la Verdad, el asesinado de los 4 periodistas fue ordenada por un coronel salvadoreño.
La anulación de la Ley de Amnistía, en 2016, abrió la esperanza de poner fin a la impunidad de este y otros crímenes. Pero han pasado dos años y no se mira el avance, dijo Jan Schmeitz, uno de los periodistas holandeses que cubría la guerra de El Salvador y, tras recibir amenazas de muerte, optó por irse del país.
Schmeitz está convencido de que, a 37 años del asesinato, Holanda merece una clarificación de los hechos. Aseguró que su país respalda totalmente la petición de investigación que han hecho los familiares de las víctimas ante la Fiscalía General de la República.
Según dijo, “en el gobierno de Holanda no había mucha presión, pero ahora con la abolición de la Ley de Amnistía el gobierno apoya el proceso que han abierto los familiares de los 4 periodistas para que se haga justicia. Ahora reciben todo el apoyo de la embajada de Holanda y del Ministerio de Relaciones Exteriores”.
Jan Schmeitz aseguró que el próximo viernes otro familiar de los periodistas asesinados llegará a la fiscalía para rendir su declaración. Se trata de la la hermana del sonidista asesinado quien solicitará seguir el proceso de investigación.
Schmeitz y dos periodistas de IKON vistan el país en el marco de la presentación del libro “Emboscada” que narra la historia de los periodistas asesinados.
