(Por: Wilver Gerardo Parada García)
Este 17 de mayo de 2019 celebramos el día de una profesión muy importante en su aporte a la vida económica del país desde diferentes puntos de vista. Esta profesión se ha profundizado aún más con la entrada de aplicación inmediata de las NIIF para las PYMES, las cuales han posibilitado al contador público a presentar información financiera más razonable y comprensible a todos los usuarios que la demanden. En El Salvador esta profesión ha crecido en el número que la desean estudiar, esto se debe que dicha profesión abre muchas puertas de carácter laboral desde emprender en un despacho contable independiente, ejercer diferentes tipos de contabilidad en la banca, seguros, empresas industriales, de servicios, comerciales, contabilidad en el gobierno y municipalidades, la incursión en la docencia hasta explorar las auditorias.
La contabilidad requiere no solo manejar aplicación técnica, a lo largo de la historia los contadores públicos, auxiliares contables se han dado cuenta que existe una diversidad de leyes tributarias, mercantiles, penales, civiles etc; que se necesitan aplicar a la contabilidad, lo cual requiere que el profesional contable se actualice año con año por las nuevas disposiciones legales que emite la Asamblea Legislativa o reformas que se realizan a las ya existentes, todo esto para ser de ésta profesión un contador competente y preparado ante las nuevas exigencias que demandan tanto las empresas relacionadas a la exigencia de información contable creíble y razonada y por otra parte el gobierno en su afán de captar los impuestos.
El contador público debe tener una base legal y técnica aplicable en todo momento, para poder demostrar su profesionalismo, ética y competencia de lo que hace. Además tiene que tener en mente que ésta profesión no solo es por cuadrar los resultados por cuadrarlos, ya que la esencia de esta linda profesión no está diseñada solo hacer mecánico, sino a presentar información financiera con cumplimiento de todos los requerimientos técnicos y legales que implican capacidad de análisis sobre lo que se pretende hacer, una interpretación de los hechos económicos y decisiones tomadas por los altos ejecutivos de las empresas, El contador público debe liderar teniendo la capacidad para motivar y lograr que sus compañeros se esfuercen en alcanzar las metas establecidas al menor costo de tiempo, recursos materiales y humanos. Saber economizar es fundamental.
Además creativo ya que debe estar listo para adaptarse a los cambios que se presenten para poder dar soluciones eficientes a cualquier problema financiero. Asumir un rol de compromiso con la empresa es una de las características fundamentales de un buen contador, ya que es el eje central entre los inversionistas, autoridades, instituciones financieras, clientes y proveedores. Debe ser capaz de tomar decisiones importantes y hacerse cargo del riesgo que conlleva, aceptar sus consecuencias y responder de sus actos. Hay que tener una buena capacidad de pensamiento lógico y abstracto que le permita analizar y comprender hechos que pasan desapercibidos del resto del equipo, debe entender las problemáticas y elegir las alternativas adecuadas. En ésta y en cualquier otra profesión, una de las características que más se valora dentro de una empresa es la honestidad que emplean al desempeñar sus funciones, lo que permitirá la confianza para realizar tareas importantes para la empresa.
La FE PÚBLICA en los profesionales de la contabilidad es muy importante tenerla en cuenta ya que brinda las facultades legales al contador en sus atribuciones que por ley tiene y garantizar que todo procedimiento contable del cual presta su servicio tenga carácter legal tanto en sus asientos u operaciones contables como también los estados financieros. Esta facultad legal obliga al contador a ser responsable sobre su trabajo el cual tiene que ser apegado a leyes, además a ser creíble y probo en el trabajo contable que desarrolle en cualquier empresa privada o pública ya que tendrá la facultad de acreditación jurada de lo que hace.
La influencia de la las nuevas tecnología a la contaduría pública
Gran parte de los contadores públicos se sienten amenazados por el avance tecnológico que afronta el mundo, pero no debería ser así los Contadores Públicos no deben tener miedo a las nuevas tecnologías. Todo lo que implique conocimiento nuevo es positivo para la profesión. Estamos en la obligación de aprender, precisamente para eso son los foros, las conferencias, los seminarios; todo tiene la firme intención de elevar nuestro nivel profesional. Otro sector temeroso es el de los estudiantes de contaduría pública que optan por la deserción provocada por la aprensión de la desaparición del profesional, sin embargo, las herramientas informáticas con las cuales puede contar el contador podrían ser un complemento ideal para su adecuada labor en la empresa, no obstante, no se trata de utilizar un software que realice los registros necesarios tributariamente, sino que se trata de ahorrar espacio en la realización de los estados financieros para entrar a analizar más detalladamente la información.
El contador público debe estar actualizado a cerca de los avances tecnológicos recientes, claro está, también debe tener competencias básicas en Tics, pues si no las tiene estará inmerso en lo obsoleto. El impacto de la tecnología en la profesión contable está fuera de toda duda, las tecnologías de información operan como motor del cambio que permite dar respuesta a las nuevas necesidades de información. Tras el proceso de globalización que sufre el planeta, la contabilidad se ha visto en la necesidad de estandarizarse, lo que convierte a las tecnologías de la información y la comunicación un elemento primordial para la comparación de los estados contables a nivel mundial.
