De acuerdo con el reporte Fatal Journeys 4 (Viajes fatales 4), resulta necesario mejorar la recogida de información sobre las muertes y desapariciones de los migrantes, en especial, lo referido a los niños que son uno de los grupos más vulnerables.
‘La falta de datos sobre las edades, las características y las vulnerabilidades de los niños migrantes desaparecidos crean brechas serias de protección’, explicó el director del cetro de la OIM encargado del estudio, Frank Laczko.
Esto hace que sea muy difícil crear programas y políticas diseñadas para protegerlos, recalcó citado por la web oficial de noticias de la ONU.
Según cifras de la OIM, durante el tiempo cubierto por el informe (2014 a 2018), del total de 32 mil muertes de migrantes, más de la mitad ocurrieron en el mar Mediterráneo
Mientras, la frontera entre Estados Unidos y México registró un aumento en el número de muertes cada año consecutivo desde 2014, lo cual arroja mil 907 durante el útimo periodo de cinco años.
Este informe se publica en medio de la conmoción internacional que generó la imagen de foto de una niña y su papá ahogados en el río Bravo al intentar esa peligrosa ruta de migración irregular. (PL)