El centro penitenciario La Esperanza, conocido como Mariona, será el primero en funcionar de manera autosuficiente en el país, es decir que los mismos reos produzcan y consuman sus propios alimentos con lo que el Estado se ahorrará $5 millones anuales.
Cada año el Gobierno destina $46 millones solamente en la alimentación de la población privada de libertad recluida en los 28 centros penitenciarios.
En total son 39 mil 800 personas que están internas en el sistema penitenciario.
El comisionado presidencial para Proyectos Estratégicos, Luis Rodríguez y el director, ad honórem, de la Dirección General de Centros Penales, Osiris Luna, recorrieron las diferentes secciones del penal de Mariona a fin de conocer las potencialidades que existen para implementar el programa de autosuficiencia.
Los reos que están en Mariona asisten a talleres de carpintería, pintura, metal mecánica, cocina, zapatería, trabajo en bambú, maquila, imprenta, entre otros.
Los productos que los reos de Mariona producen son consumidos por ellos mismos y el excedente es comercializado afuera. Este modelo puede ser replicado hacia el resto de penitenciarías.
En la penitenciaría La Esperanza están recluidos 5,034 reos de baja, mediana y alta peligrosidad. Durante el día pasan en los diferentes.
talleres o en clases de distintas asignaturas, esto funciona para combatir el ocio y a la vez obtienen conocimientos que les servirán para su reinserción a la sociedad.
“A los internos no hay que verlos solo por el delito que cometió… hay albañiles, maestros de obra, carpinteros, trabajador de estructuras metálicas, podemos certificar a esta persona para que cuando salga pueda acoplarse a la vida productiva del país”, sostiene Osiris Luna.
El presupuesto anual para Centros Penales es de 65 millones de dólares para todo el funcionamiento, incluye la comida y seguridad.
Mariona se encamina a ser el primer centro penitenciario industrial autosostenible de la región centroamericana.
Por su parte Luis Rodríguez declaró que han echado a andar una estrategia de modernización del sistema penitenciario para fortalecer el tema de la rehabilitación de los privados de libertad.
“Hay suficiente mano de obra para incidir en los proyectos estratégicos en temas de educación, obras públicas, hay bastantes cosas donde se puede trabajar”, aseguró el comisionado presidencial.
El primer paso en este tipo de proyecto, añade Rodríguez, es “ordenar la casa y luego implementar una serie de proyectos, unos que ya se están trabajando y otros nuevos bajo un nuevo modelo de penales autosuficientes”.
