La cifra ‘podría ser asombrosa’, manifestó Sands, quien actualizó el conteo en la noche de este jueves.
‘Algunos barrios han quedado reducidos a escombros, casi completamente aplastados por la tormenta. En otros, el 95 por ciento de los hogares han sido dañados o destruidos’, precisó.
Igualmente, el titular de salud solicitó la asistencia de voluntarios para ayudar a empacar cajas para enviar recursos a las islas Abaco y Gran Bahamas, las más afectadas.
En medio de este panorama, el primer ministro, Hubert Minnis recibe el apoyo internacional y junto a su equipo evalúa las estrategias de ayuda a los damnificados, en reunión con el subsecretario general de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios y el coordinador de ayuda de emergencia, Mark Lowcock.
Una delegación de altos representantes de Caricom constató el desastre y el primer ministro de Santa Lucía, y presidente de ese organismo, Allen M. Chastanet, confirmó que para el bloque regional, ‘el énfasis debe estar en ayudar a nuestros hermanos y hermanas en las Bahamas a volver a ponerse de pie en el menor tiempo posible’.
Minnis agradeció el apoyo y la asistencia de los países caribeños, quienes estuvieron atentos al avance de Dorian por tierras bahamesas y no dudaron en brindar su ayuda para levantar a la nación.
Con antelación, el gobierno de Jamaica en la voz de su primer ministro, Andrew Holness, confirmó la participación en la etapa recuperativa de soldados de la Fuerza de Defensa del Equipo de Respuesta a la Asistencia en Desastres.