Tomar café suele ser un placer (o una necesidad) para la mayoría de las personas en todo el mundo. Sin embargo, excederse en el consumo de cafeína trae consigo varios síntomas negativos que van desde el insomnio hasta problemas cardíacos. Se puede incluso llegar a una sobredosis, pero ¿cómo identificarla y prevenirla?
El café es, indudablemente, la droga más consumida en el mundo, debido a sus efectos estimulantes. En los últimos años, la ciencia se ha encargado de demostrar que tomar café no solo sirve para mantenerse despierto, sino que también proporciona beneficios a la salud, por sus características antioxidantes, por ejemplo. Por otro lado, también hay efectos nocivos y el riesgo de una sobredosis.
Según los expertos, una dosis diaria de más de 500 miligramos de cafeína (unas 4 o 5 tazas de café de filtro) ya podría considerarse excesiva para el cuerpo de un adulto promedio. Consumir más de esa cantidad de café en un día deja a la persona expuesta a una serie de efectos secundarios nocivos para la salud, como: Taquicardia, ansiedad, náuseas, vómitos y temblores
Para el profesor de Química de la Universidad Laurentina Thomas Merritt, según un artículo que publicó en la revista The Conversation, el café actúa bloqueando los receptores de adenosina, inhibiendo la capacidad del cuerpo de descansar cuando se encuentra cansado. Si bien esto permite “postergar” la fatiga, termina provocando que el sistema regulatorio del cuerpo comience a fallar, provocando ansiedad e insomnio.
