Un total de 1.370 millones de estudiantes en el mundo, el 80 % del total, no pueden asistir a las clases como consecuencia de la pandemia del nuevo coronavirus, según la Organizaciónde Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que aspira a que los países intercambien ideas para facilitar la enseñanza a distancia durante el periodo de confinamiento.
El objetivo del organismo internacional es darle apoyo a los centros y ofrecer soluciones educativas a nivel nacional, en un momento en que 60,3 millones de profesores están privados de dar clases.
Además de la puesta en marcha de medidas de enseñanza a distancia, la UNESCO considera una prioridad ofrecer auxilio emocional a profesores y familias.
“No podemos reemplazar la presencia de profesores y las relaciones pedagógicas, pero no hay opción y debemos hacer lo posible para apoyar a los responsables de centros, profesores, padres y alumnos sin dejar de garantizar su seguridad”, declaró la ministra italiana de Educación, Lucia Azzolina.
En la reunión, Azzolina se refirió al uso de redes sociales para mantener vivas las relaciones entre profesores y estudiantes, y que estos no pierdan la motivación.
Junto a la de Italia, los ministros de Educación de Costa Rica, Perú, México, Francia, Egipto, Irán, Japón, Croacia, Nigeria y Senegal son miembros del grupo creado expresamente para tratar estas cuestiones y han puesto en común algunas iniciativas.
Perú ha traducido los contenidos ofrecidos a sus alumnos a diez lenguas autóctonas para dar apoyo emocional que ayude a hacer frente al aislamiento.
Costa Rica se sirve de herramientas digitales para proponer a los alumnos y a sus padres planes de lectura diarios con desafíos para los estudiantes como, por ejemplo, idear campañas para contener la propagación de la pandemia.
El ministro mexicano, Esteban Moctezuma Barragán, informó que en su país solo 60 % de los jóvenes tienen acceso a Internet, por lo que propusieron una combinación de enseñanza a distancia y la televisión pública para que llegue a todo el mundo. México estudia igualmente estrategias para llegar también a niños con necesidades especiales.
Por su parte, el titular francés de Educación, Jean-Michel Blanquer, destacó la necesidad de una colaboración mundial para una regulación adecuada de los proveedores de aprendizaje digital, especialmente en materia de gestión y respeto de datos personales.