Con la pandemia de Covid-19, el modelo de turismo que conocía el mundo ha muerto y no volverá, sentenció el CEO de Airbnb.
El CEO de Airbnb, Brian Chesky, advirtió que la compañía se enfrenta a un futuro incierto debido a las pérdidas que han experimentando a causa de la pandemia por coronavirus.
“Tardamos 12 años en construir Airbnb y lo perdimos casi todo en cosa de cuatro a seis semanas”, mencionó Chesky en entrevista con CNBC.
“El turismo tal y como lo conocíamos se ha acabado. No quiero decir que el viajar se haya terminado, sino que el modelo que conocíamos ha muerto y no va a volver”, subrayó.
Asimismo, enfatizó en que las personas “no quieren subirse a un avión, ni viajar por negocios, ni cruzar fronteras. Vamos a subirnos a nuestros automóviles, conducir unos cuantos kilómetros a una pequeña comunidad y quedarnos en una casa”.
"We spent 12 years building Airbnb's business and lost almost all of it in the matter of 4-6 weeks," says Airbnb CEO Brian Chesky. "Travel as we knew it is over. It doesn't mean travel is over, just the travel we knew is over, and it's never coming back."@cnbc @dee_bosa pic.twitter.com/BLjb9HH2Pe
— Squawk Alley (@SquawkAlley) June 22, 2020
Justo por esta situación, Chesky indicó que la salida de la bolsa que preparaba Airbnb ahora es incierta.
Hasta antes de la pandemia de Covid-19, Airbnb contaba con 6 millones de anuncios de alojamiento en el mundo, más de 100,000 de ellos ubicados en México.
Las entidades con mayor actividad en la plataforma eran la Ciudad de México, Jalisco, Quintana Roo y Baja California; sin embargo,70% de las propiedades anunciadas eran de lugares que no son típicamente turísticos.
La firma calculó que, durante 2018, en México se generó una derrama económica de 2,700 millones de dólares (mdd) a partir de la actividad de sus reservas.
Pese a las declaraciones del CEO, la firma en México apuesta por un último recurso: dejar en manos de sus anfitriones la aplicación de medidas sanitarias y de seguridad para la recepción de nuevos huéspedes a partir de la “nueva normalidad”.