El virus de Epstein-Barr (VEB), uno de los virus humanos más comunes, está asociado con alrededor del 8-10 por ciento de los cánceres de estómago o gástricos, la tercera causa principal de muerte por cáncer en todo el mundo.Investigadores de la Universidad de Chiba en Japón, y la Escuela de Medicina Duke-NUS y el Instituto del Genoma de Singapur (GIS) de la Agencia de Ciencia, Tecnología e Investigación (A * STAR), ambos en Singapur, han revelado un paradigma novedoso en el cáncer gástrico asociado al VEB, por lo que el genoma viral de este virus altera directamente el paisaje epigenético del huésped para promover la activación de protooncogenes (genes involucrados en el crecimiento celular normal que puede mutar en genes causantes de cáncer) y la tumorigénesis.
El genoma humano es el conjunto completo de información genética humana, y el epigenoma describe modificaciones al genoma que determinan si los genes se activan o desactivan cuando y donde se necesitan. A diferencia de la información genética, el epigenoma es dinámico y responde a estímulos externos, y ciertos estímulos externos pueden causar modificaciones anormales del ADN que, a su vez, pueden alterar la expresión génica normal y contribuir al desarrollo del cáncer.