Tras el inicio de operaciones en las fronteras salvadoreñas y en el Aeropuerto Internacional “San Óscar Arnulfo Romero y Galdámez”, el próximo 19 de septiembre, el Gobierno de El Salvador exigirá a toda persona que ingrese al país un certificado de resultado negativo de la prueba PCR, de lo contrario, no podrá ingresar al territorio nacional.
De acuerdo con el procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, Apolonio Tobar, el certificado de la prueba de COVID-19 no puede prohibir o avalar el ingreso de salvadoreños o extranjeras al país.
El artículo 5 de la Constitución de la República garantiza que a ninguna persona se le podrá prohibir el ingreso, “salvo las limitaciones que la ley establezca”.
Tobar señaló que si quieren aplicar estas medidas deben pasar por una ley o tomar otras alternativas para evitar la importación de nuevos casos de COVID-19.
La Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) anunció que el próximo 19 de septiembre comenzarán a recibir vuelos comerciales de pasajeros salientes y entrantes; esperando que el 4 de octubre ya se esté ejecutando el 100% de las actividades.
La reapertura se lleva a cabo de forma gradual, inició el 4 de septiembre con la atención de vuelos comerciales de conexión (o tránsito).