Frente a esta «degradación para toda la humanidad», el Santo Padre pide que sean protegidas por la sociedad y que su sufrimiento sea escuchado.
«Los testimonios de las víctimas que se atreven a romper su silencio son un grito de socorro que no podemos ignorar. No podemos mirar para otro lado»
Cada día, 137 mujeres son asesinadas por miembros de su propia familia; las mujeres adultas representan casi la mitad de las víctimas de la trata de seres humanos detectadas a nivel mundial.
Padre Frédéric Fornos S.J.: «No podemos quedar de brazos cruzados ante tantos casos de violencia contra las mujeres, que se manifiesta de múltiples formas, desde lo más visible e incalificable a lo más insidioso e inconsciente»
Tal como dice la nota de prensa que acompaña la difusión del Video del Papa de febrero, la intención de oración que Francisco confía a toda la Iglesia Católica a través de su Red Mundial de Oración es un contundente mensaje contra los distintos tipos de violencia hacia las mujeres, ya sea “psicológica, verbal, física o sexual”. Para el Papa Francisco, esta realidad es una “cobardía y una degradación para toda la humanidad”, por lo que nos pide rezar por las víctimas, “para que sean protegidas por la sociedad y para que su sufrimiento sea considerado y sea escuchado por todos”. Éstas sus palabras:
“Hoy, sigue habiendo mujeres que sufren violencia. Violencia psicológica, violencia verbal, violencia física, violencia sexual. Es impresionante el número de mujeres golpeadas, ofendidas, violadas. Las distintas formas de malos tratos que sufren muchas mujeres son una cobardía y una degradación para toda la humanidad. Para los hombres y para toda la humanidad. Los testimonios de las víctimas que se atreven a romper su silencio son un grito de socorro que no podemos ignorar. No podemos mirar para otro lado. Recemos por las mujeres que son víctimas de la violencia, para que sean protegidas por la sociedad y para que su sufrimiento sea considerado y sea escuchado por todos.”
Millones de mujeres sufren diariamente distintos tipos de violencia
El Video del Papa de este mes busca hacer visible el drama de este tema también a través de la narración con imágenes, la violencia que cada día sufren millones de mujeres en el mundo. Gracias a la colaboración de Hermes Mangialardo -creativo italiano, ganador de premios internacionales y profesor de diseño de animación-, el video representa con ilustraciones animadas la historia de una mujer víctima de la violencia, que encuentra el coraje para escapar del túnel de los abusos, gracias a su propia fuerza y a la ayuda de la comunidad.
La violencia contra las mujeres en cifras
“Es impresionante el número de mujeres golpeadas, ofendidas, violadas”, dice el Santo Padre en El Video del Papa. En efecto, las estadísticas que recoge la ONU Mujeres, actualizadas desde noviembre de 2020, son impactantes: cada día, 137 mujeres son asesinadas por miembros de su propia familia; las mujeres adultas representan casi la mitad de las víctimas de la trata de seres humanos detectadas a nivel mundial; a escala mundial, una de cada tres mujeres ha experimentado alguna vez violencia física o sexual (y 15 millones de niñas adolescentes de 15 a 19 años han experimentado relaciones sexuales forzadas en todo el mundo).
El año pasado, además, contó con el agravante de la pandemia: la restricción de movimiento, el aislamiento social y la inseguridad económica elevaron la vulnerabilidad de las mujeres a la violencia en el ámbito privado en todo el mundo. Aunque al menos 155 países han aprobado leyes sobre la violencia doméstica, y 140 cuentan con legislación sobre el acoso sexual en el lugar de trabajo, por poner dos ejemplos, no significa que estas se ajusten siempre a las normas y recomendaciones internacionales, ni que se apliquen y hagan cumplir – se lee en la nota de prensa.
El comentario del padre Frédéric Fornos S.J.
El P. Frédéric Fornos S.J., Director Internacional de la Red Mundial de Oración del Papa, hizo la siguiente observación sobre esta intención: “La llamada del Santo Padre es muy clara: ‘No podemos mirar para otro lado’. Es decir, no podemos quedar de brazos cruzados ante tantos casos de violencia contra las mujeres, que se manifiesta de múltiples formas, desde lo más visible e incalificable a lo más insidioso e inconsciente; en todos los casos, como producto de esquemas mentales y paradigmas culturales y sociales arraigados, que las desvalorizan. Es lo que vemos en el Evangelio, por ejemplo, en el pasaje de la mujer adúltera, que era acusada por todos, pero a quien Jesús da una vida nueva (Juan 8, 2-11). La violencia contra las mujeres en todas sus formas es un grito al cielo. Francisco lo dijo varias veces: ‘Toda violencia infligida a la mujer es una profanación de Dios, nacido de una mujer. La salvación para la humanidad vino del cuerpo de una mujer: de cómo tratamos el cuerpo de la mujer comprendemos nuestro nivel de humanidad’. Recemos juntos por todas las mujeres víctimas de violencia, incluidas las niñas y adolescentes, y luchemos por una sociedad más justa, para que las proteja, las escuche y alivie su sufrimiento”.