Por: Giovanny Preza*
Cuando no es época de campaña electoral al leer los periódicos nacionales físicos o digitales, navegar por las redes sociales, al escuchar los noticieros y los diferentes programas de las radios o al ver los noticieros y los programas de opinión en la TV hay temas muy repetitivos (delincuencia, salud, economía, educación, corrupción, fútbol español y el transporte público) que acaparan la atención de los políticos, del público en general y la opinión de los “conocedores’’ que son entrevistados por estos medios de comunicación:
Olvidemos los otros temas y centrémonos en el transporte público (buseros y microbuseros) y en la opinión de los viejos y nuevos políticos; cuando estos hablan de este sector las expresiones o los señalamientos más comunes son: Hay que sancionarlos por alza en tarifas de buses, buseros salvajes, buses chatarras, delincuentes con permisos del Viceministerio de Transporte (VMT), congestionamiento vehicular por culpa de los buseros, cafres al volante, la Policía Nacional Civil (PNC) tiene que aplicarles las leyes de tránsito, los buses son los mayores contaminantes del medio ambiente, se roban el subsidio del estado, nunca paga las esquelas, mal servicio al usuario del transporte público, rutas de la muerte, seudo empresarios, hay que quitarles los permisos o las líneas y muchas más malas expresiones. Por la anterior pareciera que son lo peor de lo peor, que son representantes del averno; para rematar cuando el COVID 19 centro toda la atención se dijo que las unidades de transporte podrían ser los mayores focos de infección del famoso virus.
Por consiguiente, ningún político de los actuales les “apoya” abiertamente, los “nuevos” les huyen como a los leprosos en la época de Jesús y los Vice Ministros del VMT de turno siempre están en guerra total contra ellos por lo menos ante la opinión pública.
Para echar más leña al fuego a este sector y para no olvidar que día tras día o viaje tras viaje son extorsionados o les piden la renta en los diferentes sectores o lugares donde circulan diariamente.
Pero llega su agosto, la navidad, los reyes magos o les aparece el genio de la lámpara en la época de las elecciones porque de la noche a la mañana todos los políticos ya no hablan de ellos y por derivado se alejan del foco de los medios de comunicación y simplemente ya no son temas de conversación en ningún pasillo o foro público. En esta época los transportistas con esos buses discriminados en cierta época del año son los que llevan a los seguidores o no de los partidos políticos a las concentraciones o mítines políticos, en sus costados o en la parte trasera llevan esos nuevos rostros de “jóvenes” políticos pidiendo el voto con una sonrisa fingida y con un gran trabajo de los especialistas del Photoshop y de otros programas de diseño; el día de las elecciones los buseros son los más buscados y queridos por que les llevan a sus votantes hasta las urnas principalmente a los que residen en el campo o los que los centros de votación no están a la vuelta de la casa.
Dentro de unos meses posterior a las elecciones se va el sol y regresaran las nubes negras sobre ellos y les empezaran a decir todo lo peyorativo que se pueda, se escribirán muchos titulares condenándoles, en muchas plenarias de la Asamblea Legislativa los rostros que hoy lucen en sus diferentes rutas los tildaran de mercenarios, regresaran a la guerra con el VMT y contra la opinión pública. Lo bueno es que ellos ya son viejos lobos de mar y revisan el próximo calendario electoral para saber cuándo les toca ganar el premio gordo nuevamente.
*Consultor Empresarial.