La noche del 26 de abril de 1986 el reactor 4 de la central nuclear de Chernóbil, 110 kilómetros al norte de Kiev, estalló y se incendió. Eso resquebrajó el edificio y expulsó material radiactivo. Las autoridades soviéticas empeoraron la catástrofe al ocultar lo ocurrido. Aunque la cercana localidad de Pripyat, donde vivían trabajadores de la planta, se evacuó al día siguiente, los 2 millones de habitantes de la capital de Ucrania no fueron informados pese al riesgo. El mundo sólo supo del desastre cuando se detectó un aumento de la radiación en Suecia. Finalmente fueron evacuadas más de cien mil personas y se estableció una zona de exclusión de 2 mil 600 kilómetros cuadrados. La radiación siguió hasta 2019, cuando todo el inmueble quedó cubierto por una enorme estructura. Chernóbil ha visto crecer el número de turistas tras una premiada miniserie de televisión. La planta está fuera de servicio, pero se espera que el desmantelamiento de los cuatro reactores culminará hasta 2064. La imagen es de ayer en monumento a las víctimas en Slavutych.
Fuente: La Jornada