Consecuencias de la derrota de estados unidos en Afganistán

Aunque es muy temprano para tener una idea de las consecuencias que pudiera tener la derrota de Estados Unidos en Afganistán, ya se pueden ver algunas, en primer lugar la tormenta política que se ha desatado en los estamentos políticos en Washington, al menos un general pide la cabeza de Biden, al considerar que no se debe pedir un juicio político al presidente, sino un consejo de guerra, esta petición refleja el estado de disgusto ante las críticas recibidas por los aliados de Washington y la población estadounidense, al concluir de una forma tan bochornosa la retirada de Afganistán, claro los opositores políticos del presidente estarán prestos a obtener los mejores beneficios de la debacle.

Por: Igor Ivan Villalta*

Estos movimientos debilitan la presidencia de Joe Biden, e indudablemente pierde espacios políticos importantes a nivel mundial y doméstico, lejos están los años en que los soldados estadounidenses eran recibidos con euforia y flores en Europa, por ser las tropas libertarias, que “habían ganado la Segunda Guerra Mundial” las consecuencias para la humanidad del triunfo de los aliados en la Segunda Guerra Mundial, marcaron el afianzamiento de Estados Unidos como potencia mundial, y el surgimiento de otras potencias como la Unión Soviética.

En nuestra América significó la imposición de férreos regímenes militares que controlaban la vida de toda la población, la intromisión política y económica es aún hoy en día abusiva, siempre con la amenaza latente de que gobierno alguno que no siguiese los dictados de Washington podía ser derrocado por un golpe de estado y en el último de los casos invadido con tropas norteamericanas, hasta que las condiciones geopolíticas lo permitan.

La primera gran derrota la obtuvieron los norteamericanos en la guerra del Vietnam, después de haber aniquilado a tres millones de vietnamitas. El problema se suscitó cuando la población norteamericana vio como sus hijos eran envueltos en bolsas negras, y los recibían en ataúdes con la bandera de Estados Unidos. Y es que, desde esos momentos dolorosos para la población norteamericana, debe existir una buena argumentación para convencer al pueblo norteamericano que se debe ir a la guerra.

Precisamente eso se logró con el derribo de las torres gemelas, la población se unió a la figura de George Bush, en la lucha contra el terrorismo internacional, pero ya en el gobierno de Barak Obama, se sabía que la guerra en Afganistán no se podía ganar, el problema eran quien asumía la retirada de las tropas, Donald Trump firma el acuerdo de Doha en donde se establecen las condiciones para la retirada de las tropas norteamericanas, en donde los talibanes se comprometen a no prestar su territorio para dar cobijo a terroristas, y la normalización de las relaciones con Israel y los Emiratos Árabes Unidos.

Pero por cuestiones del destino, el trago amargo le tocó a Joe Biden, ahora los problemas son variados y muchos. En primer lugar, como convencer a los norteamericanos que deben seguir enviando a sus hijos a la guerra porque es necesario defender la democracia y el modo de vida americano que están en peligro. El sometimiento de otras naciones al poderío político, económico y militar de Washington se ejerce en escalas, en Latinoamérica se ha usado la modalidad de los golpes suaves utilizando las leyes para encarcelar a todos los funcionarios que proceden de la izquierda política y que son desafectos a Washington, o tratan de ejercer una política soberana independiente, a estos hay que enjuiciarlos y llevándolos a la cárcel.

Por otro lado, se utiliza el aparato mediático para desprestigiarlos ante la población con el fin de darles muerte política, si con eso no logran sus objetivos, bueno entonces existe la amenaza directa del uso de la fuerza militar, como lo hacía Donal Trump cuando se refería a Venezuela, en donde explicaba que “todas las opciones están sobre la mesa”. Preguntémonos si esta táctica puede ser utilizada en estos momentos, y si Estados Unidos sigue siendo un aliado fiable.

La derrota en Afganistán tiene repercusiones en otras tropas desplegadas en territorios como Irak, y Siria, ¿podrá Estados Unidos seguir manteniendo esos contingentes de tropas O deberá retirarse? Por otro lado, se ha dejado una cantidad impresionante de armamento en manos de los talibanes, convirtiéndolos en una potencia armamentista, además de eso se les entregó elementos tecnológicos importantes que puede ser usado por otras potencias como Rusia y China, misiles con tecnologías sofisticadas, aeronaves con mecanismos para no ser detectadas, esta tecnología ahora están en manos de lo que ellos definen como sus enemigos.

Si no veamos cómo después de la guerra del Vietnam, las armas estadounidenses fueron empuñadas por los movimientos de liberación en África y en América Latina, ahora ese armamento es demasiado para las fuerzas afganas, que harán con él, lo venderán a otros países, ¿o a fuerzas irregulares? se desconoce cuál será el fin de ese arsenal bélico.

Considero que con estos acontecimientos se abre una nueva era en las relaciones de los países pobres con los países ricos, que lo que funcionaba anteriormente para someter a los pueblos a los designitos de las potencias imperiales ya no funciona ahora, también debemos pensar en los aspectos humanos, en la ola de refugiados que se viene, se agregan cientos de miles más de los que huyen de sus países, por ser pobres, discriminados, marginados, o que simplemente buscan salvar sus vidas y la de su familia.

*Docente Investigador

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