El Vaticano pedirá el “pase verde” sanitario a todos sus trabajadores y visitantes desde octubre. La misma medida ya había sido anunciada por el Gobierno italiano.
Según una ordenanza firmada por el presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, el cardenal italiano Giuseppe Bertello, el «pase verde» será obligatorio para «ciudadanos, residentes y personal en servicio» vaticanos a partir del 1 de octubre.
La norma, de tres artículos, establece además que deberán exhibir el certificado «todos los visitadores y usuarios de los servicios» de la Santa Sede.
Por el momento, quedarán exentos de presentar el certificado o el test negativo de coronavirus los fieles que participen de misas dentro de las Iglesias vaticanas, aunque solo «por el tiempo estrictamente necesario para la realización del rito, sin perjuicio de las leyes vigentes y los requisitos sanitarios sobre espaciamiento, sobre el uso de dispositivos de protección individual, sobre la limitación de la circulación y la concentración de personas y sobre la adopción de normas específicas de higiene».
El pase sanitario en Italia
El Gobierno italiano decretó que desde el 15 de octubre y hasta 31 de diciembre, el pase sanitario -que los ciudadanos reciben cuando completan la pauta de la vacuna contra el coronavirus- será obligatorio tanto para los empleados públicos como privados y quien no lo tenga, no podrá entrar a trabajar y arriesga perder el sueldo, ser suspendido y perder el propio empleo.
El efecto de la medida fue inmediato: el sábado pasado, al día siguiente de cuando el Gobierno aprobó este decreto, “las personas que recibieron la primera dosis de la vacuna aumentaron entre el 20 y el 40 por ciento en comparación con el sábado de la semana precedente”, comentó el general Francesco Figliuolo, comisario extraordinario de la emergencia Covid.
Según esa organización, casi 41 millones de italianos (el 75,64 por ciento de la población) mayor de 12 años, ha completado el ciclo de vacunación.
Fuente: Pagina/12