Por GDA | El Universal | México.
Para transparentar la deuda se necesitan sistemas integrados de registro y mejoras en el seguimiento de la deuda mundial.
Los países más pobres saldrán de la pandemia de covid-19 con la mayor carga de la deuda en las últimas décadas, dijo el presidente del Grupo del Banco Mundial (BM), David Malpass.
Señaló que la transparencia limitada de la deuda retrasará la reconciliación y reestructuración de la deuda crítica.
Al dar a conocer el resultado del estudio «Transparencia de la deuda en las economías en desarrollo», consideró que se requiere de un marco legal sólido de gestión de la deuda pública.
Para transparentar la deuda se necesitan sistemas integrados de registro y mejoras en el seguimiento de la deuda mundial.
Dijo que las instituciones financieras internacionales, los deudores, acreedores y otras partes interesadas como las agencias calificadoras, y la sociedad civil, tienen un papel clave que desempeñar en el fomento de la transparencia de la deuda.
Según el estudio del BM, el 40% de los países de bajos ingresos no han publicado ningún dato sobre su deuda soberana durante más de dos años.
Además, muchos de los que lo publican tienden a limitar la información a la deuda del gobierno central y dependen cada vez más de préstamos respaldados por recursos, en los que los gobiernos aseguran el financiamiento poniendo como garantía futuras corrientes de ingresos.
Los préstamos respaldados por recursos representaron casi el 10% de los nuevos préstamos en África subsahariana entre 2004 y 2018; más de 15 países tienen esa deuda, pero ninguno proporciona detalles sobre los acuerdos de garantía.
Enfatizó que los bancos centrales también están utilizando herramientas de política monetaria, como repos y swaps, para facilitar el endeudamiento del gobierno con acreedores extranjeros.
Pero ese endeudamiento no se identifica claramente en los balances de los bancos centrales ni se registra en las bases de datos de las instituciones financieras internacionales, advirtió.
Afirmó que los mercados de deuda interna en las economías más pobres también son opacos, ya que según el informe sólo el 41% de estas economías utilizan subastas basadas en el mercado como el principal canal para emitir deuda interna. Y aquellos que utilizan subastas divulgan solo información irregular a los inversores.
Fuente: El Economista.