“Matanga. F. coloq. Juego infantil consistente en arrebatar de un golpe lo que el otro niño tenga en la mano. Dijo la Changa. Expr. Pop/coloq. Se usa para arrebatarle algo a alguien de forma amistosa”. Uno de las frases que se considera un mexicanismo, usado por Roberto Gómez Bolaños y Homero Simpson.
Por: Francisco Parada Walsh*
Tal frase cobra vida en El Pinochini de América, ya no es una expresión ni coloquial ni popular sino que está enquistada en la vida del salvadoreño, que su único pecado capital es haber nacido en El Salvador de Qué. Poco a poco y frente a nuestras narices que crecen cada día mas, nos arrebatan el futuro, la vida, la dignidad y en esa inanidad, en ese vacío que vivimos, no parece importar lo que pasa.
“Matanga dijo la Changa” para arrebatarme mi vida, no se escucha pero lo vemos día a día cuando aparece la foto de un joven desaparecido. Que una sociedad voltee la espalda a la tragedia que vivimos, habla de lo malo que somos, no, que nos arrebaten la vida de una joven no se vale y no es un juego de niños, sino un juego de diablos.
“Matanga dijo la Changa” cuando de un golpe me arrebatan el dinero de las pensiones, hablo por todos los salvadoreños, en mi caso, apenas dispongo de mil dos cientos pesos que serán divididos en tantos meses mientras viva; “Matanga dijo la Changa” cuando de un golpe cierran sedes de estudios superiores y les arrebatan una posibilidad de superarse a jóvenes que su único error es ser pobres en un país pobre que es saqueado por algunos no tan pobres.
“Matanga dijo la Changa” cuando todos los ex presidentes, ex funcionarios de pasadas y de la actual administración nos han exprimido como a una naranja robándose nuestro dinero y ahora, son hombres millonarios, libres, “señores”.
Esa es una realidad que incomoda y que, el estamento político se arma de tal forma que no queden huellas de lo arrebatado, vivimos en un país que una persona le enseña a un ex – presidente cómo esquilmar más de tres cientos millones de dólares y ese mismo personaje es recomendado para que le enseñe a otro ex –presidente cómo salir impune arrebatando más de tres cientos millones de dólares salvadoreños, y este profesor del mal, vive a toda madre en la Tierra de Cochise, dispone de grandes ingresos mensuales mientras vive de las rentas que le produce ser dueño de una cuadra de locales, hombres libres que nos reventaron a más no poder y mientras, esperamos que los super mercados pongan las ofertas de licores baratos, no, eso no puede faltar en navidad, poco importa la verdad y “Matanga dijo la Changa”.
Ex funcionarios que hace doce años no tenían más que una mano adelante y otra atrás, ahora ya no laboran con el gobierno, viven de lo arrebatado a esa madre que acaba de parir un bellísimo bebé que no tiene la menor idea que su futuro se lo arrebataron no “Lo mismos de siempre” sino “Unos peores que los mismos de siempre”.
No hay duda que el dinero es un dios y tenemos a una sociedad con cara de rebaño que creemos ser buenos ciudadanos, aun, grandes hijos de dios pero he visto ladrones de esos ex –pobretones ex –presidentes comulgando, orando y menuda suerte tuvo el cura que no le arrebataron alguna prenda valiosa; ese es mi país y ya no siento vergüenza de ello, al contrario, debo impregnarme de esa indolencia para no sufrir más, para entender que pueden pasar pandemias, terremotos, fines del mundo y ese gen, esa maldita genética se esconderá en algún lugar, en los bigotes de una cucaracha y en cien mil años, germinará ese mismo salvadoreño que tanto amó Roque Dalton, siempre jodido, siempre perdido, siempre diciendo “Matanga dijo la Changa”.
Vivo en un auto exilio y aun, en esa pequeña sencillez del área rural, no hay quien se escape de “La Changa”, el rico jode al pobre, el pobre jode al pobre, y mientras, realice sus sueños más primitivos, apenas llegue a la base de la pirámide de Maslow y tiene todo el derecho a respirar, dele muerte al chompipollo, zámpese el guaro que quiera, descanse en una hamaca, eche su polvito pero no puede decir “Matanga dijo la Changa”.
*Médico salvadoreño