¿Qué pasará cuando algunos de izquierda comprenda que Bukele, a quien apoyaron, está contra sus principios? ¿Qué pasará cuando GANA y NUEVAS IDEAS entiendan que han sido utilizados, sin lograr cambios, destruyendo sólo a los opositores de Bukele, favoreciendo a millonarios extranjeros y políticos oportunistas?
Por: Fernán Camilo Álvarez Consuegra
¿Qué pasará cuando los Alcaldes y sus Consejos renuncien a sus partidos políticos, sin lograr los proyectos reclamados para sus municipios? ¿Qué pasará cuando los políticos, que ahora apoyan a Bukele por dinero, no lo reciban? ¿Qué pasará cuando sólo haya dinero para pagar a soldados y policías y, el resto de los empleados públicos, no puedan cobrar dinero físico o con respaldo? ¿Qué pasará cuando el Gobierno haya despilfarrado los fondos de pensiones?
El núcleo partidario de Nuevas Ideas, procede de los cuadros del FMLN, con fuerte ideologización: se sumó a dicho partido, en reclamo a la cúpula del FMLN, por la gobernabilidad, que éste mantenía, desde los Acuerdos de Paz.
Pensaron que Bukele, era la continuidad de la lucha revolucionaria y, llevaría al poder las ideas de Izquierda; se planteó así, la propaganda de Bukele, hacia el interior del FMLN, debilitando el poder de su cúpula, y fallando en el intento de tomarse dicho partido. Mientras que para el gran empresariado, se presentaba como organizador de grandes negocios.
Pero ese núcleo, fuertemente ideologizado, está siendo utilizado como factor secundario en el Gobierno (empleados públicos), que en algún momento tendrán que reaccionar cuando adviertan que sus acciones, sólo benefician a millonarios extranjeros y, a la cúpula del Gobierno en la forma más pura del mercantilismo y, que cada acción gubernamental, va tendiente a perjudicar a cada salvadoreño.
Hasta las acciones más pequeñas, van encaminadas a dañar a la población: al suprimir el FODES se condena a la indigencia a las Municipalidades pequeñas y éstas, se ven en la necesidad de poner impuestos hasta a las tortilleras o, cobrar por parquear en la acera frente a su casa. Se deja sin medicinas al Seguro Social y el Ministerio de Salud, inocula a la población, con vacunas vencidas.
Los Alcaldes y sus Consejos, son inducidos a renunciar a sus partidos políticos, para poder calificar para las obras municipales y donde GANA o Nuevas Ideas, han perdido dominio político, será substituido por la pseudo-oposición, iniciada por el Gobierno. Si un ex funcionario, se ve obligado a renunciar a su partido, pero ingresar a otro nuevo, para no ser investigado o, ir a la cárcel, no asegura lealtad alguna, solo resentimiento, venganza y odio.
Si el descontento generado por el Gobierno, ha sido el catalizador de marchas multitudinarias, pese al control policial y militar, en derredor de San Salvador, ¿Qué pasará al crecer el descontento general, sin poder manifestarse libremente? Habrá en el país, catorce manifestaciones simultaneas.
Y viene la siguiente pregunta: ¿El Gobierno decretará en esos días, toque de queda, so pretexto de la pandemia? ¿Tendrá suficiente fuerza para evitar el descontento y su manifestación, si la sociedad, no ve sus ingresos incrementados, pero sí, la inflación, con desabastecimiento de la canasta básica?
El Gobierno, ha cambiado la legitimidad, por la mentira y la propaganda populista, basada en el engaño: proponer grandes ganancias a los ancianos, si usan el Bitcoin, en vez de asegurar una pensión digna, devolviendo el dinero que el Gobierno ha tomado, en base a la Ley (hecha por ellos mismos) de los fondos de pensiones y, devolver la rentabilidad que originalmente se planteó.
Nayib Bukele, forjó afilada bayoneta, contra los partidos tradicionales y, se está sentando en ella, cuando el país, necesita estabilidad.