La jueza Karla Romero juramentó a Xiomara Castro como presidenta de Honduras, la primera en el cargo, en presencia del titular del Congreso Nacional, Luis Redondo, y de una multitud reunida en el capitalino Estadio Nacional.
«Prometo ser fiel a la República, cumplir y hacer cumplir la constitución y sus leyes… Queda usted en cargo de su puesto como presidenta de la República de Honduras», proclamó Castillo al tomar la protesta de Castro, ganadora de los comicios de noviembre pasado al frente de una alianza encabezada por al Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda).
La flamante presidenta de Honduras afirmó que su asunción como primera mujer jefa de Estado del país rompe con dos siglos de cadenas y tradiciones, lo cual consideró un logro de la voluntad popular.
«La presidencia de la República nunca ha sido asumida por una mujer en Honduras. Han tenido que pasar 200 años desde que se proclamó nuestra independencia. Estamos rompiendo cadenas y estamos rompiendo tradiciones. Este hecho histórico solo pudo surgir de la voluntad mayoritaria del pueblo. Gracias pueblo hondureño», proclamó Castro.
En su primer discurso como presidenta, Castro adelantó que recibió un país en bancarrota, con una deuda «estruendosa y bochornosa» heredada de 12 años de administraciones del derechista Partido Nacional, las cuales calificó de «dictadura».
Castro ganó las elecciones presidenciales del pasado 28 de noviembre como candidata de una alianza opositora liderada por el Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), que puso fin a 130 años en los que los partidos Liberal (conservador) y Nacional (derechista) se alternaron el poder.
El presidente saliente, Juan Orlando Hernández, se negó a participar en la ceremonia de traspaso, rompiendo así un protocolo respetado desde 1981, cuando retornó el orden democrático a Honduras luego de décadas de regímenes militares.
Jefes de Estado y de Gobierno, así como funcionarios de alto nivel, están presentes en el capitalino estadio para la ceremonia, que fue financiada con donaciones en efectivo y especies de simpatizantes de Castro y sus promesas de acabar con los estigmas de corrupción e impunidad que arrastra Honduras.
Tomada de https://mundo.sputniknews.com
Si te gustó, compártelo