NOS MANIFESTAMOS FRENTE A LA EMBAJADA DE ARGENTINA EN SAN SALVADOR, EXIGIENDO
Libertad para Facundo Molares y No-Extradición al narco-régimen asesino de Colombia.
El internacionalismo es una de las expresiones más altas de la solidaridad. La Historia de la humanidad está abonada de la sangre de multitudes de mujeres y hombres quienes como José Martí y Simón Bolívar sintieron que “Patria es Humanidad” y entregaron su vida generosa en la lucha de liberación de pueblos y naciones, lejos de la tierra que los vio nacer.
Cada una de estas heroínas y héroes representa los valores de amor más altas de un revolucionario.Entre ellxs destaca el ejemplo de entrega sin fronteras del Che Guevara, ícono mundial del Internacionalismo, Tania La Guerrillera quién lo acompañó en Bolivia y un sinfín de internacionalistas heroicos en Nuestra América, Camilo Torres, Illich Ramírez “Carlos”, Henry Reeve, Farabundo Martí, Jesús Rojas, Juerg Weiss, Begoña García Arandigoyen “Alba”, Alexandra Betancourt “Julia”, Pakito Arriarán “Juancito” y más de un centenar de Internacionalistas viniendo de muchos países a ofrecer su sangre a la revolución todavía inconclusa del pueblo salvadoreño. ¡Y cómo no mencionar esa enorme legión de médicos y médicas, alfabetizadores y alfabetizadoras de Cuba socialista que aún hoy, en las peores circunstancias derivadas de la pandemia y del criminal Bloqueo endurecido ejercen el internacionalismo solidario en muchos países de nuestro Continente y del Mundo entero!
El joven argentino Facundo Molares es un revolucionario de pura cepa, de esos que combinan teoría y práctica y la traducen en acción cada vez que sea necesario para bien de los pobres y los pueblos. Un militante de la vida y luchador por la Patria Grande de América. Fue parte de la juventud comunista (la Fede) en Argentina y luego marchó a incorporarse a las filas de las FARC en Colombia, donde luchó durante años hasta que se acogió, como tantos otros y otras, a los acuerdos de paz.Regresó a su país de origen y empezó su nueva militancia en la comunicación popular y contrainformativa al servicio de los que no tienen voz.
Facundo Molares decidió viajar a Bolivia para ejercer su rol de corresponsal de la revista argentina de izquierda «Centenario». Mientras cubría como reportero los sucesos del golpe de estado fascista contra el gobierno plurinacional de Bolivia, Facundo fue brutalmente baleado, detenido y torturado por la policía golpista.A consecuencia del mal trato recibido durante su captura estuvo 23 días en coma. A esto se sumaron otros 25 días en terapia intensiva, ya que para detenerlo, los esbirros policiales lo balearon, incrustándole tres municiones de plomo en el cuerpo. Incluso, en la actualidad aún tiene una bala alojada en el cráneo y una esquirla que le provoca dificultades en un ojo.
Trasladado al penal de Chochocoro, ubicado a casi 4000 metros de altura, en el Alto, La Paz fue incomunicado, sufriendo hipertensión arterial y con un pulmón funcionando al 50% de su estado normal.En ese marco, y durante toda su detención, la solidaridad militante en Argentina y en otros países del continente pusieron bien alto su nombre en las calles, mientras los medios hegemónicos no solo no hablaban de su caso, sino que cuando lo hacían lo tipificaban como un «terrorista peligroso».
Como fruto de esta solidaridad popular y de la recuperación victoriosa del gobierno por parte del pueblo boliviano, llegó el ansiado día de la libertad para Facundo.Así, tras casi un año de prisión en Bolivia y al borde de la muerte, viajó a Argentina en un avión fletado por la Cancillería y desde su llegada se dedicó por una parte a atender su deteriorado estado de salud, y por la otra a militar en el Movimiento de Rebelión Popular.
Pero el imperialismo y sus cómplices no cejan nunca en perseguir a quienes se atreven a enfrentarlo y combatirlo: En noviembre pasado Facundo fue detenido nuevamente, esta vez por la policía del gobierno “de izquierda” de Alberto Fernández. Para ello se utilizó la lamentable excusa de que el régimen fascista colombiano lanzó una orden de captura internacional y pedido de extradición, aceptada rápidamente por la Cancillería argentina.
Es necesario redoblar la presión popular en Argentina y en toda Nuestra América para que Facundo Molares pueda ser urgentemente atendido por un servicio médico responsable y de confianza que ayude a curar las consecuencias de sus heridas y torturas recibidas y exigir su inmediata Libertad y la NO-Extradición al Estado colombiano, violador de los Derechos Humanos, quién desde los Acuerdos de Paz ya asesinó a más de 300 excombatientes desmovilizados y centenares de líderes sociales y cometiendo a diario masacres.
NUESTRA DECLARACIÓN FUE RECIBIDA POR EL PERSONAL DE LA EMBAJADA ARGENTINA.
Tomada de www.resumenlatinoamericano.org
