La alimentación además de ser una necesidad de las personas es una de las cosas que más se disfruta hacer, pues en torno a los alimentos se viven momentos únicos junto a familiares personas queridas. De acuerdo con expertos, llevar una alimentación adecuada es clave para tener una buena salud y así mitigar la aparición de enfermedades como algunos tipos de cáncer, hipertensión, obesidad, entre otras.
Sin duda, comer le permite al ser humano adquirir los nutrientes necesarios para desarrollar sus actividades y tener una buena calidad de vida. Su importancia es innegable, pero, con el pasar de los años, la alimentación no adecuada ha ganado terreno y ha afectado la salud de las personas.
Entre algunos de los concejos que se pueden aplicar para prevenir este tipo de condiciones está el de buscar alimentos ricos en fibra (integrales) con poca o ninguna adición de azúcar, sal o grasa. También se recomienda tener una dieta rica en frutas y verduras y adecuar las proporciones de cada tipo de alimento.
Según el médico Carlos Didier Fernández, una buena alimentación “implica incluir alimentos de todos los grupos alimenticios en justa proporción, es decir, se deben privilegiar las frutas y verduras, así como las proteínas tanto animales como vegetales y dejar de lado el consumo de los carbohidratos de todo tipo (las conocemos como harinas), además una hidratación adecuada favorece el funcionamiento de nuestro organismo”.
De acuerdo con Fernández, lo ideal es que desde niños se aprenda a comer de una forma sana, para así replicar esos hábitos a lo largo de la vida. Desde el entrono familiar se debe evitar el consumo de comidas procesadas, paquetes, dulces o comida chatarra. Disminuir estos alimentos en la dieta es determinante para no darle paso a una mala alimentación que promueve horarios desordenados y falta de ejercicio.
Además, hay que resaltar que comidas con exceso de grasa o, “esa comida chatarra genera depósitos de grasa sobre las arterias del corazón hasta taponarlas. O incluso ocasiona diabetes que también afecta nuestro corazón al dañarlo internamente”, resaltó el doctor Carlos Didier Fernández.
