Las familias más vulnerables de la región de América Latina y el Caribe son las más afectadas por la pandemia, que les ha causado problemas en la alimentación, empleo y acceso a servicios de salud, según lo reveló una encuesta de Unicef.
Una nueva encuesta realizada por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (más conocido como Unicef) alertó que la pandemia empeoró las condiciones de acceso a comida para familias de América Latina y el Caribe. Desde que empezó la pandemia, la mitad de hogares con niños, niñas y adolescentes de la región redujo el tamaño de porciones de alimentos para adultos, mientras que se registró que en el 15% de hogares se consumen menos de tres comidas diarias.
“El shock de la pandemia está lejos de haber terminado. Muchos padres siguen luchando por recuperar los empleos que perdieron durante la pandemia y no tienen la posibilidad de poner suficiente comida en los platos de sus hijos”, indicó a través de un comunicado Youssouf Abdel-Jelil, Director Regional de Unicef para América Latina y el Caribe.
“Las familias más vulnerables no se han recuperado, lo que pone en riesgo la salud y el bienestar de los niños, niñas y adolescentes”, agregó Abdel-Jelil. Según los resultados de la encuesta, antes de la pandemia, el 67% de los adultos en estos hogares trabajaban, y ahora esa cifra cayó al 60%. El 37% de los hogares, además, dependen de ingresos informales.
A pesar de que las necesidades de las familias más vulnerables siguen presentes, dice Unicef, “la encuesta reveló que solo el 24 % de los hogares con niños, niñas y adolescentes reciben actualmente algún tipo de ayuda gubernamental, frente al 43 % en 2020″
Garantizar alimentación, empleo y atención médica son las principales demandas de las familias de la región encuestadas. Unicef también “hace un llamado a los gobiernos para que sigan invirtiendo en los niños, niñas y adolescentes, y dando a sus familias el apoyo que necesitan para reducir los efectos de la pobreza a lo largo de toda la vida”, indicó la agencia de la ONU a través de un comunicado.
Fuente: El Espectador