En un comunicado a propósito del Mes de la Historia de la Mujer, el jefe de Gobierno señaló que la conmemoración es una oportunidad para resaltar el desempeño de ellas en la creación de un país más justo y reconocer el trabajo que queda por hacer.
El tema de este año: Ella lo hizo, entonces ahora yo puedo, rinde homenaje a aquellas pioneras que alzaron su voz como agentes de cambio en campos en los cuales estaban poco representadas, como las artes, la educación y la política, y allanaron el camino para que las futuras generaciones de mujeres y niñas tuvieran éxito, precisó.
En este sentido, recordó el legado de Rosemary Brown, la primera mujer negra canadiense en ocupar un escaño en una legislatura provincial e inspiró a otras a dedicarse a la política, así como Sheila Watt-Cloutier, nominada al Premio Nobel de la Paz.
El mensaje señala los avances de la nación desde el primer Mes de la Historia de la Mujer, hace 30 años.
“Gracias a la labor de las activistas y los movimientos feministas, las mujeres de Canadá tienen derecho a elegir, permiso parental remunerado y, en los lugares de trabajo regulados por el Gobierno federal, la garantía de recibir la misma remuneración que sus homólogos”, indicó.
De igual forma, el texto llama a continuar la promoción en la igualdad de género y a invertir más para abordar las causas fundamentales de desigualdades, incluido el acceso a una atención infantil asequible y a la salud sexual y reproductiva.
El Mes de la Historia de la Mujer es decretado anualmente para remarcar la contribución de ellas, y es celebrado en Canadá en octubre, mientras países como Estados Unidos lo conmemoran en marzo.
Según reportes de medios, entre los flagelos que enfrenta la nación están casos de discriminación y hay evidencias de violencia sistémica contra mujeres y niñas indígenas.