– Banco Mundial (BM) alerta que El Salvador requeriere ayuda alimentaria.
– Ministro de Educación, Mauricio Pineda, aseguró que “no hay frijol en el país”.
– Productores Agropecuarios estiman que hay producto hasta julio.
La falta de frijol para cubrir la alimentación de los alumnos en las escuelas disparó los temores de que El Salvador no disponga del producto para satisfacer las necesidades de la población.
El ministro de Educación, Mauricio Pineda, aseguró que “no hay frijol en el país”, y que buscan una solución para abastecer de este alimento en las escuelas.
Pero el presidente de la Asociación Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios, Luis Treminio, estimó que para cubrir el mercado hay producto hasta los meses de julio y agosto, por lo que es precipitado decir que “no hay frijol en el país”.
La situación coincide con informes del Banco Mundial (BM) que alertan El Salvador requerirá de asistencia alimentaria a más tardar en agosto y que los pobres del país carecen de reservas de granos básicos.
Esa situación sumada a la inflación, se sentirá en meses próximos, tanto que para enfrentarla, los salvadoreños necesitarán de asistencia alimentaria externa en agosto de 2023, precisó la última actualización de Seguridad Alimentaria de la entidad financiera.
El informe del BM aseguró que los hogares rurales pobres cuentan con reservas mínimas de granos básicos del ciclo de postrera, debido a que los agricultores de subsistencia disminuyeron las extensiones productivas y las aplicaciones de fertilizantes a causa de sus altos precios y a que algunas áreas sufrieron daños por exceso de lluvias.
En medio de una intensa sequía que ahora afecta la agricultura, los hogares de agricultores de subsistencia en el Corredor Seco, particularmente en los departamentos San Miguel y La Unión, podrían no contar con cosechas suficientes para mejorar su alimentación para agosto, según organizaciones gremiales del campo.
Al respecto, Luis González, miembro de la Mesa por la Soberanía Alimentaria, consideró que es necesario el apoyo de organizaciones tanto nacionales como internacionales para paliar la crisis que afecta o afectará a las comunidades.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) pronosticó que este año, la cantidad de personas que sufren hambre en América Latina y el Caribe subirá entre 350 mil y 640 mil personas, a causa del conflicto en Ucrania, y de ese problema El Salvador no está exento.
En años recientes (2019-2021), un millón de salvadoreños fue afectado por inseguridad alimentaria grave, es decir que se quedó sin alimentos, se saltó alimentos e incluso paso días sin estos, y tres millones sufrieron inseguridad alimentaria moderada o grave, lo que significa que no tuvieron dinero o recursos suficientes para llevar una dieta saludable, según la FAO.
Esta situación de carencias pudiera verse incrementadas en 2023 por los efectos del cambio climático, principalmente la sequía, y el alza del costo de los fertilizantes, Estiman expertos. (PL)