Cuando la manipulación masiva se convierte en la reina de la fiesta
El fenómeno que se está viviendo en El Salvador es un claro ejemplo de cómo el populismo puede ser utilizado como un experimento social para el control y la manipulación de la población.
La retórica virtual que se ha creado, magnificando los hechos favorables al poder oficial y manipulando la información a nivel nacional e internacional, ha llevado a la población a una situación de sumisión y conformismo generalizado.
La concentración total del poder en manos de un grupo oligárquico y hegemónico cercano al ejecutivo, junto con la eliminación y exclusión de formas de participación política de otros, ha destruido las alternativas democráticas y ha llevado a la población a una situación de súbdito del régimen. Mientras a mucha gente no le importa, que siga la fiesta, la manipulación masiva sigue en la cresta.
La retórica virtual “Pan y Circo Digital”, que se ha creado, con un alineamiento total de los medios tradicionales y digitales, provocando una población a una situación de sumisión apatía.
La situación es bastante preocupante y la falta de educación y análisis crítico es un problema real, que debe ser abordado de manera seria y efectiva. La educación es vital, porque la manipulación masiva se ha normalizado.
Mucha gente sin análisis crítico, se mueve por el like. La falta de formación es el problema. La dictadura del like se convierte en dilema y sin duda será una de las mayores tragedias. Nos encontramos ante un experimento social de estilo dictatorial, que ha logrado la sumisión temporal de la población, a través de mecanismos de manipulación masiva.
Sin embargo, esta situación no es sostenible a largo plazo y la acumulación de inconformidades y la incipiente organización, dispersa aún, de una resistencia social son un peligro de explosión social y olla de presión a mediano plazo.
La única solución sostenible a largo plazo es la recuperación de las alternativas democráticas y la eliminación de la concentración del poder en manos de un grupo oligárquico y hegemónico cercano al ejecutivo.