¿Había escuchado hablar sobre el stealthing? Fíjese que en países como Dinamarca, Grecia, Suecia o España, dentro de sus códigos penales, ya legislan sobre consentimiento.
Por: Claudia Viveros Lorenzo
Se habla del SI y del NO sin matices, sin grises. Y reconocen como violación todo aquello que no sea consensuado en materia sexual, pues podría ser muy fácil quedarse con las interpretaciones que a cada quién le convengan y muchos hacer lo que les viene en gana.
El Stealthing es una práctica, que como su nombre en inglés indica, señala una conducta sigilosa. En este caso, el quitarse el condón en el acto sexual sin que la pareja con que se comparte en ese momento, se de cuenta. En México, las últimas semanas ha saltado al dominio público la situación que ha tenido que enfrentar, la activista María Elena Ríos, oaxaqueña quien fue atacada con ácido, por obra del ex diputado del PRI Juan Verá Carrizal, lo que causó 90% de quemaduras en todo su cuerpo, con quien sostuvo una tormentosa relación, la cual al dar termino, el ex diputado, en venganza, organizó el ataque a traves de terceros.
María Elena, tardó un poco en reconocer, porque por desgracia, la mayoría de las víctimas, se averguenzan de ser abusadas, sin darse cuenta, que el error no esta en ellas. Pero este ataque con ácido, no había sido la única violación a su integridad que había vivido. Se encontraba con miedo y en estado vulnerable. Pero la vida la ha llevado a ser un ejemplo y a sentar un parte aguas en nuestro país, en términos de violencia.
Hace algunas semanas, al contestar un mensaje en redes al colectivo Poder Prieto, que Huerta comanda, hizo la denuncia pública sobre el gaslighting y el stealthing que vivió junto con el actor Tenoch Huerta (quien ha saltado a la fama de forma internacional por ser parte de una de las ultimas cintas de Marvel) al cual, ha calificado de depredador sexual.
Obviamente Tenoch, sacó un comunicado negandolo todo, señalando a Ríos, de tergiversar la situación y anunciando que sus abogados se encargarían. Y fíjese, sin darse cuenta, el señor de una u otra forma le hizo a Ríos un gaslighting público. Pues la tildó de loca, de que no entendió las cosas y que se imaginó cosas. ¿Le parece conocidas este tipo de actitudes de alguna de sus parejas?, pues le cuento que eso, eso es el gaslighting, la tendencia a decir: estás loca, te lo estás imaginando, no era esa mi intención y tú no entendiste, etc. Para luego victimizarse y hacer sentir a la víctima que sus alucinaciones lo dañan. A partir de aquí ponga atención a lo sucedido que habla por si solo. Sí ya sé que todo el mundo tiene el derecho a defenderse, pero, hay formas. Y también debe de quedar algo sentado y claro, ya basta de poner siempre en tela de juicio a la víctima sumergidos en dinámicas ancestrales que han servido para el sometimiento continuo de nuestro género. Basta de considerar a quien expone y señala, una loca, o ardida. Lo que es peor, basta entre nosotras de alimentar supuestos. Estamos realmente para escucharnos. Sigamos. Tenoch ha dejado la fimación de una película que estaba comenzando a rodar junto a Manolo Caro, producción de Netflix, pues dice que tiene no quiere manchar a la producción con su escándalo y que necesita limpiar su reputación. Una cereza más para este pastel, fue el mensaje de apoyo y de la actriz Fernanda Tosky quien, expuso haber tenido una experiencia similar con el actor y brindó apoyo incondicional a Ríos.
Todo ha hecho que se vuelvan a considerar las propuestas de ley que desde el 17 de agosto se han presentado para que este tipo de actos salga de las lagunas legales en las que se ha estancado y de una vez por toda se tipifique y sancione, dentro de las reformas al artículo 199 Bis del Código Penal Federal, con 3 a 8 años de prisión y 80 días de multa como se ha propuesto. Porque no, no es cuestión de chiste, de “querer sentir más”, o de todas las barbaridades que se toman como pretexto, para llevar a cabo esta acción. Hacerlo es exponerse y exponer al otro a infinidad de enfermedades de transmisión sexual o a tener un embarazo no deseado. Se trata simplemente de atropello. Sí de atropello y de no saber aceptar un NO. Creo que desde ahí hay que trabajarlo y hablarlo. Es educación, principios, valores, respeto.