El Tribunal declara culpable al ex ‘ministro del Interior’, que quedará inhabilitado de por vida, tendrá que pagar 8.000 euros de multa y deberá indemnizar con 200 millones de euros a la Santa Sede junto a los otros ocho condenados.
El cardenal italiano Angelo Becciu es desde esta tarde el primer purpurado en la historia de la Iglesia en ser condenado por el propio Vaticano a una pena de cárcel por motivos económicos: 5 años y 6 meses de prisión por malversar más de 200 millones de euros de la Santa Sede, esto es, un tercio de los fondos de la Secretaría de Estado.
Además, tendrá que pagar una multa personal que asciende a 8.000 euros. A ello se suma la pena del pago solidario junto a los otros ocho condenados a una indemnización al Vaticano por el daño causado de 200 millones de euros. Por si fuera poco, el Tribunal del Vaticano ha ordenado el decomiso de unos 166 millones de euros.
De los diez imputados, el Tribunal habría absuelto de todos los cargos de los que se acusaba al sacerdote Mauro Carlino, mano derecha de Becciu en tanto que era ex secretario personal suyo.
Así lo recoge la sentencia sobre el juicio más complejo vivido hasta la fecha en la Santa Sede vinculado a algo más que una errada gestión del patrimonio eclesial. Pasadas las cuatro de la tarde, el presidente del Tribunal Vaticano, Giuseppe Pignatone, procedía a la lectura del auto en la sala polivalente de los Museos Vaticanos que tuvo que ser habilitada para acoger este macrojuicio que ha durado dos años con 85 audiencias, 600 horas de vistas orales, 69 testigos, además de miles de páginas de expedientes.
Un agujero de 139 millones de euros
De esta manera, habría quedado probado que Becciu sería responsable de una operación especulativa vinculada a la compraventa irregular de un edificio en Londres que generó un agujero de más de 139 millones de euros en la hucha vaticana. De hecho, la acusación apuntaba que este inmueble, que en su momento fue sede de los almacenes Harrods, en el barrio de Chelsea, había costado a la Santa Sede unos 350 millones de euros pero que fue luego vendido por el Vaticano por 186 millones de libras.
El Tribunal del Vaticano ha encontrado culpable al que llegó a ser el tercer hombre más importante de la Iglesia católica como sustituto de la Secretaría de Estado con Benedicto XVI y con Francisco, lo que en términos civiles vendría a ser un ministro de la Presidencia o ministro del Interior. Junto a él, también se ha condenado a los otro ocho imputados por malversación, corrupción, blanqueo, estafa, abuso y falsificación de documentos.
Becciu, que ya había sido defenestrado por Francisco de todos sus honores cardenalicios, incluida la posibilidad de participar en un futuro cónclave, ha sido inhabilitado de manera “perpetua” para ejercer cualquier cargo en la Santa Sede, tal y como describe el auto judicial que fue leído por el presidente de la corte, Giuseppe Pignatone.
La Fiscalía había pedido 7 años de cárcel para Becciu
La Fiscalía vaticana había pedido para el cardenal 7 años y tres meses de prisión, pero el Tribunal no habría llegado a esta cifra máxima, entre otros motivos, porque excluye al clérigo de su responsabilidad en la gestión económica de las polémicas acciones de un fondo financiero.
En este caso, con un total de diez imputados, también han sido condenados René Brülhart y Tommaso Di Ruzza, ex presidente y director de la Autoridad de Inteligencia Financiera (AIF) del Vaticano, a quienes se les impuso una multa de 1.750 euros.
Para Enrico Craso, antiguo asesor financiero de la Secretaría de Estado, el Tribunal impuso una pena de 7 años de prisión y 10.000 de multa, junto a la inhabilitación para ejercer cargos públicos. Para el financiero Raffaele Mincione, 5 años y 6 meses, más 8.000 euros e inhabilitación para cargo público.
Casi cuatro años de cárcel para ‘la dama del cardenal’
Para el antiguo empleado de la oficina administrativa de la Secretaría de Estado, Fabrizio Tirabassi, le corresponden 7 años de prisión y 10.000 euros de multa, junto a la inhabilitación para cargo público.
El abogado Nicola Squillace tendrá que pasar un año y 10 meses de prisión. Para el corredor de bolsa Gianluigi Torzi, 6 años y 6.000 euros de inhabilitación, más sujeción, en virtud del artículo 412 del Código Penal, a vigilancia especial durante un año.
Tres años y nueve meses es la condena para la gerente Cecilia Marogna -conocida por los medios italianos como ‘la dama del cardenal Becciu’-, e inhabilitación temporal por el mismo periodo, además de una multa de 40.000 euros para su empresa Logsic Humanitarne Dejavnosti.
Fuente: Vida Nueva Digital