El progreso social cayó en 2023 por un desempeño peor de lo esperado derechos y voz, inclusión y educación superior.
El progreso social en El Salvador retrocedió en 2023 a su nivel más bajo en los últimos cinco años, debido a un peor desempeño en aspectos como derechos y voz, inclusión y educación social, revela la última edición del Índice de Progreso Social (IPS).
El Salvador es uno de los 61 territorios que mostraron una disminución significativa de 170 países analizados por el IPS, elaborado por el Social Progress Imperative de Estados Unidos. El IPS utiliza una metodología para medir el bienestar de la población más allá del aspecto económico, al combinar indicadores sociales y ambientales.
La última edición del IPS, publicada el 11 de enero pasado, confirma que El Salvador volvió a retroceder al lograr una calificación de 62.3, la más baja desde el puntaje de 63.1 que se agenció en 2019.
Con este resultado, el país también mostró una reducción desde el puntaje de 63.5 obtenido en el IPS de 2022, cuando se colocaba en la posición 99 en la escala mundial, detalló Manuel Sánchez Masferrer, coordinador del Centro de Progreso Social (CPS) de la Fundación Poma, el socio local de la organización estadounidense.
Actualmente, El Salvador se coloca en la posición 100 en el ranking mundial y ocupa el puesto 14 de los 18 países considerados de la región de América Latina.
¿Qué pasó?
El IPS incluye 50 indicadores compilados en tres dimensiones: necesidades humanas básicas, fundamentos de bienestar y oportunidades. Cada uno se divide a su vez en cuatro grupos.
El componente que experimentó la mayor reducción en 2023 es derechos y voz, donde se mide aspectos como libertad política, protección social y libertad de asociación.
De esto, la reducción más significativa se registró en “protección social frente a la arbitrariedad” que puede ser ejercida por el Estado o agente de la sociedad, así como en el indicador de inclusión de grupos minoritarios.
Sánchez aseguró que es un “fenómeno mundial” porque en “la gran mayoría de los países ha reportado caída en estos aspectos y se debe, en parte, a todas las restricciones que impusieron durante la pandemia, de las cuales algunas han quedado”.
En el caso de El Salvador ha contribuido, añadió el coordinador, a las medidas adoptadas por el gobierno para controlar la inseguridad, principalmente por el régimen de excepción que se encuentra vigente desde marzo de 2022.
Mejoras.
El coordinador destacó que es “evidente” que en los últimos tres años hubo una mejora en los temas de seguridad, tanto en la reducción de la tasa de homicidios como en la mortalidad de accidentes de tránsito.
También hubo un avance en la cobertura de agua y saneamiento, así como en acceso a la vivienda.
En temas de educación, El Salvador sigue “bastante estancado” desde que se mide el IPS, a partir de 2011. “No habido mejoras en educación básica, seguimos con los mismos números de cobertura y seguimos teniendo una muy baja calidad de educación”, añadió Sánchez.
De igual manera, el país tiene una de las evaluaciones más bajas en el acceso a educación superior, producción académica y calidad de las universidades.
El dato
El Salvador se ubica en el puesto 14 de 18 países en América Latina. Se encuentran en peor condición Guatemala, Honduras y Nicaragua, así como Venezuela.
Fuente: Diario El Mundo