Los científicos asignaron un programa individual de marcha y encontraron buenos resultados.
L os científicos de la Universidad Macquarie en Australia propusieron las caminatas como el remedio más asequible para la lumbalgia, un dolor frecuente en la parte inferior de la espalda.
El estudio publicado en The Lancet demostró los beneficios de esta actividad, sobre todo cuando su realización es de manera regular.
Para llevar a cabo su investigación, trabajaron con un grupo de 701 adultos recuperados de recientemente de la dolencia.
Los científicos les asignaron un programa individual de marcha y a seis sesiones educativas dirigidas por fisioterapeutas durante seis meses.
Después de un año, el primer grupo «tuvo menos recaídas y de menor gravedad en comparación con el conjunto de control”.
Entre las principales ventajas de la propuesta, destacaron su simplicidad, bajo costo y practicidad para casi cualquier persona, más allá de su ubicación geográfica, edad o situación socioeconómica.
«No solo mejoró la calidad de vida de los participantes, sino que redujo aproximadamente a la mitad la necesidad de buscar asistencia sanitaria”, afirmó la profesora Natasha Pocovi.
Además, conllevó muchos otros beneficios, como la mejoría cardiovascular, la densidad ósea, un peso saludable y la salud mental.
Para aprovechar estos hallazgos, esperan ahora explorar el enfoque preventivo en la atención rutinaria de los pacientes con lumbalgia recurrente.
