Jean Pinatel, criminólogo francés, en su obra “La Sociedad Criminógena”, opina que no se puede definir una política criminal, sin un conocimiento previo de la etiología de la criminalidad. Las ideas principales de su obra son: Primero, que el micro medio de situaciones pre criminales, es una reducción del macro medio social.
Por: José Guillermo Mártir Hidalgo*
L o que supone, entonces, que las circunstancias sociales, en gran parte, son responsables de la criminalidad. Segundo, Pinetal le apuesta a la Prevención y convertir la Prisión en Institución Educativa, por medio de fases que incluyen un tratamiento entre tres a cinco años en medios institucionales de semilibertad y de libertad, a través de Técnicas Individuales y Grupales. Y Tercero, consideran que la política criminal debe dirigirse a atacar las raíces sociales de tal fenómeno e ir construyendo una nueva sociedad donde prevalezca la libertad, el amor, el desinterés, la entrega y el honor.
La Criminología, dice Pinetal, es la ciencia del fenómeno criminal. El Crimen, es un acto criminoso. El Criminal, el autor del acto criminal. Y la Criminalidad, los actos criminales que se producen en un tiempo y lugar determinados.
Para este autor, los factores biológicos y sociales influyen sobre el crimen, por medio de la personalidad y la situación. Ya que un acto criminal es consecuencia de la personalidad en acción. Y el entorno social, multiplica las situaciones criminales y facilita la estructuración de personalidades criminales.
Desde el punto de vista de la etnología, asevera, un crimen extra tribal, la muerte de un extraño, por ejemplo, no provoca reacción en el grupo al que pertenece el criminal. Todo lo contralto es la muerte de un conocido, es decir, un crimen intratribal. Este tipo de crimen afecta a todo el grupo.
Por tanto, La criminalidad se clasifica, según Pinetal, de la siguiente manera: Criminalidad de Adaptación económica y cultural, producto de la indigencia económica y cultural. Es decir, derivada de la pobreza, el vivir en barrios bajos y pertenecer al estrato social inferior. Criminalidad que resulta del consumo de alcohol y drogas. Criminalidad Organizada, que se desprende del gansterismo y eI bandidaje. Criminalidad Lúdica, que surge de la delincuencia juvenil.
El micro medio de situaciones criminales es reducción del macro medio social. En una sociedad, dirá, existen masas de sujetos conformes con la ley, otras con tendencias criminales, así como un ejército de reserva del crimen, constituido por personalidades margínales.
Una personalidad criminal, expresa, se caracteriza por egocentrismo, labilidad, agresividad e indiferencia afectiva. Egocentrismo, consiste relacionar todo con uno mismo. Labilidad, es la ausencia de reflexión sobre la consecuencia de sus actos. Agresividad, sinónimo de hostilidad, ira y furor. Indiferencia Afectiva, es la ausencia de emociones e inclinaciones altruistas.
La Familia, comenta, tiene un papel decisivo en la etiología del crimen. Principalmente, familias que socializan a sus miembros con una disciplina severa e irregular, con hostilidad e indiferencia y ausencia de unidad familiar.
Por otro lado, Pinetal señala algunas de las circunstancias sociales que incrementan la criminalidad: Anomia Social, que es la incongruencia entre los objetivos sociales y medios para lograrlos, lo cuáles pueden ser ilegales. Esto, dice el autor, es campo de desarrollo del egocentrismo. Darwinismo Social, un sistema económico basado en la competencia despiadada, genera frustración y resentimiento que se traduce en agresividad. Exclusión Social, por el fracaso de las mayoría de los medios socioeconómicos utilizados en lograr una posición social, termina por propiciar una Subcultura de la Violencia, que se confunde con audacia, coraje y termina por generalizarse como forma de solucionar los problemas. “Cretinización” del Público, donde los Mass Media, elaboran climas ficticios y contribuyen a exagerar el sentido y significación de las manifestaciones sociales. Por tanto, los sujetos piensan y se comportan como los Media se lo presentan y estos, sustentan una ideología favorable a la violación de la ley en ciertos espacios y programas.
Respecto a la delincuencia juvenil, afirma, se debe a una inadaptación que obstaculiza su inserción social. En la adolescencia se da un desequilibrio entre madurez física y psíquica. Mientras, la sociedad crea necesidades que inducen al consumo, al lujo y al exotismo, las que presionan a los adolescentes, quienes ya no encuentran en la familia lo que encontraban antes.
Esta inadaptación puede ser: Física, por enfermedad o deficiencia. Psíquica, incluye a débiles mentales y caracteriales. Moral, jóvenes educados en medios marginales y criminales. La mayoría de manifestaciones antisociales de los jóvenes son en bandas como la inactividad, la excitación frenética, violencia ligada a la sexualidad y el robo de automóviles y bicicletas. Pinetal considera que la violencia entre jóvenes puede ser debido a Frustraci6n Cultural, resultante del vació moral y espiritual, y al abuso de drogas o estupefacientes, como mecanismo de huida y evasión.
En su obra, el autor clasifica la prevención de la criminalidad de la siguiente manera: Prevención Social, en referencia a la publicidad comercial y propaganda política, que debe orientarse a la defensa social frente al alcoholismo. A la vez, brindar información y educación contra el abuso de drogas. Así como habilitar programas que fomenten la estabilidad familiar. Prevención de la Criminalidad Organizada, es competencia de la Policía. Y Prevención General, corresponde al ámbito penal. Al respecto, la pena por el delito debe ser superior al placer del acto criminal. Su finalidad es, suprimir la voluntad inmoral que anima al delincuente.
La criminología, en su parte punitiva, dice Pinetal, propone la pena de muerte para eliminar criminales. Dicha medida ha sido fuertemente cuestionada. Así como destierro, exilio o deportación, que consisten en ser expulsado del grupo. Y la segregación penitenciaria, expresada en la prisión, también cuestionada por su factor criminógeno. Ya que crea una conciencia colectiva que facilita la maduración criminal y el aprendizaje del crimen. Al mismo tiempo, la asociación entre malhechores.
Pinetal propone, entonces, una prisión educativa en condiciones de probación, semilibertad y libertad condicional: Probación, donde hay pena nominal pero el delincuente es puesto en libertad. Semilibertad, como sustituto de penas cortas e incluyen trabajos correccionales. Libertad Condicional, es una gracia de la disciplina carcelaria. El tratamiento que propone incluye la cura psico moral, la readaptación y adaptación social. Éste oscila entre tres o cinco años en un medio institucional, de semilibertad y de libertad condicionada. Por medio de técnicas individuales, en medios de semilibertad y libertad. Y técnicas grupales en medios institucionales, a través de terapias de grupo. El tratamiento comprende las fases de documentación y observación, toma de conciencia de sí mismo y de los demás y periodo de crisis.
El autor expresa, que una auténtica política criminal, debe atacar las raíces sociales de la criminalidad e ir construyendo una nueva sociedad basada en valores como la libertad, el amor, el desinterés, la entrega y el honor.
Pinetal insiste que, si se orienta la Política Criminal hacia la represión ciega, fracasara. La familia disfuncional, por ejemplo, es formadora de la personalidad delincuente. Y esta es la más frecuente en nuestro contexto social. Pinetal nos dice, finalmente, que una política criminal debe ser estratégica, dirigida a impactar los factores criminógenos que existen en nuestra sociedad. No como la actual, dirigida por la represión y formas paliativas de reinserción social.
*Psicólogo salvadoreño