Cada mujer ocupa un espacio importante en la sociedad y tiene derecho a vivir una vida libre de violencia. Sin embargo, en El Salvador se registraron 386 muertes violentas de mujeres en 2018. Son 386 mujeres que ya no están en la sociedad salvadoreña. Son 386 mujeres que hacen falta.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, cientos de zapatos, carteras y prendas de vestir fueron colocadas en la avenida España, frente a la Plaza Gerardo Barrios para simbolizar a las 386 mujeres salvadoreñas que fueron asesinadas en 2018. Cada prenda representa a una de las mujeres víctima de feminicidio o de otro tipo de muerte violenta en El Salvador.
Con esta creativa instalación, organizaciones sociales y artistas plásticas mostraron la magnitud de la violencia contra las mujeres en El Salvador, país que hasta septiembre de 2019 registraba 192 feminicidios, de acuerdo a información del Instituto de Medicina Legal recopilada por el Observatorio de Violencia contra las Mujeres de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA).
La iniciativa contó con el apoyo de voluntarias y voluntarios de organizaciones sociales desarrollaron la idea y lideraron la selección y ordenamiento de cada una de las piezas dispuestas en el asfalto.
La instalación artística forma parte de las actividades de incidencia del proyecto “Estrategias de contraloría ciudadana y reforzamiento institucional para una política de seguridad con enfoque de género que reduzca la vulnerabilidad social ante la violencia”, que busca el abordaje integral de la seguridad de las mujeres desde las políticas públicas.
Esta instalación artística será replicada en los próximos días en los departamentos de La Libertad y La Paz, en donde la, Asociación de Promotores Comunales Salvadoreños (APROCSAL) y Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA) y Asamblea de Cooperación por la Paz (ACPP) ejecutan el proyecto, el cual es cofinanciado por la Unión Europea.
Las políticas públicas de seguridad deben incluir un enfoque de género diferenciado y para ello el proyecto desarrolla acciones para fortalecer las capacidades de las instituciones vinculadas a la implementación de las políticas públicas de seguridad; y fortalecer las capacidades de las lideresas y las organizaciones de la sociedad civil para garantizar el derecho a la participación y el desarrollo de ejercicios de contraloría y vigilancia social en las políticas y planes de seguridad ciudadana.
